@SuarezRMarca | El rumbo que lleva el Málaga bajo la dirección de Richard Shaheen y la presidencia de Abdullah Bin Nasser Al Thani ha hecho que las empresas que forman parte del Málaga Business Club (MBC) empiecen a no ver claros los beneficios de su relación con el club blanquiazul.
El MBC o Club de Negocios del Málaga CF nació para que, en el entorno del fútbol, se llevaran a cabo sinergias de diversa índole entre empresarios de la provincia. Una idea que ha servido también a la entidad para conseguir acuerdos que de otra manera hubiera sido complicado conseguir. Pero la satisfacción hay que mantenerla en el tiempo. Y en los últimos meses y, especialmente, en la última semana, estas sociedades malagueñas no están nada contentas con las decisiones que se están tomando desde la directiva.
El cómo se ha llevado la destitución del ya ex entrenador, Víctor Sánchez, el despido de personal de las áreas de márketing y comunicación, así como la imagen del club asociada a denuncias varias y, por supuesto, la gestión (sic) de Al Thani, no dejan en buen lugar al Málaga, cuya imagen ya estaba visiblemente dañada en el entorno futbolístico. Pero esto incluso ha trascendido a ese mundillo.
De ahí que hayan sido varios en ese Club de Negocios los que se han reunido y han hablado sobre este malestar con los rectores y acerca de la posibilidad de tomar algunas medidas drásticas para hacerles ver a los responsables que esa dirección que han tomado no es la idónea ni para ellos ni para sus empresas. Perder algunos de esos apoyos sería catastrófico para un Málaga que necesita justo lo contrario, aumentar sus ingresos atípicos para no poner más en riesgo su viabilidad, ya comprometida por su insolvencia económica.
