@Danielnz97 || Kieszek compareció ante los medios de comunicación y, pese a que fue una de las ruedas de prensa más cortas de lo que llevamos de temporada, dejó varios titulares. Del "tenemos que echar un poquito más de cojones" al "no podemos bajar la cabeza como con Osasuna". Probablemente, el polaco sea uno de los que menos culpa tenga de la mala racha del equipo -tres victorias en los últimos once encuentros-, precisamente porque no juega desde el año pasado (Albacete, Almería -en Copa, Tenerife y Córdoba), pero, sin embargo, fue uno de los más autocríticos con las últimas actuaciones del Málaga CF, que iría décimo tercero si solo se contara esta segunda vuelta.
El guardameta, sobre las críticas prácticamente generalizadas de la afición, apuntó que "son siempre buenas escucharlas" y que en La Rosaleda "tenemos 20.000 entrenadores y cada uno tiene su opinión". "Nosotros tenemos uno, con su táctica, y vamos con él; y sí, yo creo que podemos jugar un poco más ofensivo y presionar un poco más". Fue el propio técnico asturiano, Juan Ramón López Muñiz, quien se preguntaba hace menos de dos semanas que qué era eso de la ambición y que quién lo decía. Ha sido en este caso el propio Kieszek quien ha reconocido que el equipo, en este sentido, puede dar más.
También echó la vista atrás y volvió al choque ante los rojillos para decir que no puede volver a pasar lo de aquel día: "No como Osasuna, que jugamos 45 minutos muy bien y un detalle… bajamos la cabeza; no se puede repetir eso". Hizo hincapié en que no hay que pensar ahora ni en el ascenso directo, ni en la promoción, ni en nada que no sea el partido del domingo contra el Nàstic de Tarragona. Parece que será de nuevo Kieszek -ahora con la competencia de Werner tras su fichaje en invierno- quien ocupará la portería por la ausencia de Munir, convocado para jugar dos partidos con Marruecos. Jugará contra el mismo rival con el que jugó su último encuentro -el 17 de noviembre-. El polaco está "preparado" y, en caso de repetir, espera "hacerlo bien".