@CesarRadioMARCA | Si yo fuese aficionado del Elche, me daría vergüenza haber ganado un partido como el que consiguió llevarse de Málaga. Lo más antifutbolistico que se ha visto sobre un rectángulo de juego en mucho tiempo, se sufrió en La Rosaleda. No quisieron jugar, fingieron agresiones, engañaron con lesiones inexistentes y se encararon con todos los futbolistas del Málaga, impotentes de poner fin al barriobajerismo ilicitano.
Así que con esos condicionantes, sólo se pueden valorar los primeros 45 minutos de partido. Y ahí se le volvieron a ver al Málaga las mismas carencias que le han complicado la vida durante toda la temporada y que les han impedido cerrar, a día de hoy, la permanencia. Con una defensa rival amurallada, los de Schuster son incapaces de encontrar huecos. Ya podrían jugar doscientos encuentros así que no marcarían ni un solo gol. Ni siquiera el balón parado fue esta vez la solución para esos males.
Para colmo de males, los blanquiazules se encontraron un gol en contra a los diez minutos de juego. Lo que era el inicio de un prometedor contragolpe terminó siendo, tras un error de Samu en el pase, en un soberano golazo de Rodrigues. Desde entonces le cedieron la pelota a los de Schuster y se limitaron a defender con las líneas muy adelantadas. Con la torrija de los locales, incapaces de dar dos pases seguidos, los de Escribá recuperaban muy rápido el balón y muy cerca de la portería de Willy, que tuvo que intervenir en dos grandes ocasiones para salvar goles clarísimos.
Tuvo una, sólo una, el Málaga. Un gran pase de Camacho, un sensacional desmarque de Roque Santa Cruz… y un lamentable tiro del paraguayo. Ahí se acabó el poder ofensivo del Málaga mientras Amrabat y Van Nistelrooy veían el partido desde el palco de autoridades. Lo que hubieran hecho los dos en el terreno de juego, incluso aunque Ruud esté retirado desde hace dos años.
Tras la reanudación, Schuster quiso sumar creatividad al equipo con la entrada de Pablo Pérez por un desafortunado Samu… pero la historia de esa segunda mitad ya la saben. El Elche sumó tres puntos que le ponen cerca de una salvación que el Málaga, con 41 puntos, aún no ha sabido cerrar. La conseguirá, seguro, pero por los fallos de los rivales, no por sus propios méritos.
