@RadioMarcaMLG | Federico Brinkmann, el que fuera presidente del Club Deportivo Málaga entre 1977 y 1981, uno de los períodos más convulsos y difíciles de la historia del club blanquiazul, falleció horas antes del partido que se disputó en La Rosaleda ante el Real Madrid.
Entre sus logros, al margen de un ascenso en 1979 y de trasladar las oficinas del club al estadio de Martiricos, se encuentra el de haber apostado por el también fallecido Sebastián Viberti como entrenador, a pesar de toda la controversia que generó entre el comité de entrenadores. También recuperó al mítico Ben Barek, aún hoy en el club.
A pesar de todos los problemas, incluidos amenazas de embargos del estadio, Brinkmann logró ceder el testigo de la presidencia a Pérez-Gascón y ganarse el cariño del malaguismo, ejemplificado en el escudo de oro y brillantes de la entidad.
Desde Radio Marca Málaga nos sumamos al dolor de sus familiares, amigos y malaguistas. Descanse en paz, Federico Brinkmann