@Danielnz97 || El 2018 será siempre recordado, en lo positivo, por el doble ascenso del Atlético Malagueño y del Femenino en un 27 de mayo multiorgásmico un mes después de que el primer equipo masculino descendiera de forma matemática. Once años más tarde regresaba el filial a la categoría de bronce del fútbol tras varios intentos fallidos en los que el objetivo se rozó y se acarició. La decepción de abandonar la Primera División, con todo lo que eso supone, contrastaba, en cierto modo, con el valor y la importancia de tener a la base tan solo un escalón por debajo, misma situación que en el caso de las chicas, ya que al conjunto dirigido por Contreras le acompañó -de Segunda B a Segunda- el entrenado por Ayala.
El año comenzó con cinco victorias consecutivas. Enero triunfal para encaminar y seguir poniendo las piedras necesarias para llegar a la meta. Solo tres derrotas desde febrero hasta mayo para conseguir ser el líder de la competición regular, con diez puntos de diferencia respecto al Almería B, y, así, solo tener que superar una eliminatoria. Si no, segunda oportunidad, aunque con más escollos que dejar atrás. Pero el equipo de Dely Valdés no falló ante el Yeclano y certificó, al fin, su regreso a la 'C'. Ahora tocaba preparar, con la filosofía de equipo filial -juventud y talento para formar jugadores que pueden llegar a ser parte del primer equipo- una plantilla dispuesta a sufrir para mantener la categoría.
La inexperiencia y la inocencia, el desacierto de Dely Valdés y la confianza de Muñiz en jugadores importantes como Harper, Mula -hasta su lesión-, Iván e Hicham, lastraron a un equipo -perjudicado también porla salidad del talentoso Abeledo- que no fue capaz de adaptarse a la categoría hasta los meses de octubre y noviembre, ya sin el panameño en el banquillo, que fue destituido tras siete derrotas consecutivas al inicio. Tras buscar y, finalmente, aunque con muchas dificultades tras varios rechazos, encontrar al sustituto -Manolo Sanlúcar-, los blanquiazules puntuaron por primera vez en la jornada 9. Y no fue hasta la 12 cuando llegó la primera victoria en el derbi contra el Sevilla Atlético (2-3), que se repitió una semana más tarde ante el Sanluqueño (2-1). No han vuelto a ganar los costasoleños en los cuatro partidos posteriores, en los que sí que logró dos empates ante el Badajoz (2-2) y el Ibiza (1-1).
El regreso de Hicham, que dejó de contar para Muñiz, ha sido una de las mejores noticias para el Malagueño. Dos goles del marroquí en tres encuentros que han valido dos empates. Un rayo de luz para Sanlúcar, que ha mejorado de forma considerable al equipo: 9 de 30 posibles; 0 de 24 hizo Dely. Números que no son suficientes para un club que ve la permanencia desde la lejanía. La veintena con la que se mantiene en el puesto de promoción por el descenso el Marbella se traduciría, en el caso de que haga una segunda vuelta similar y no varía en exceso la situación en lo que al resto se refiere, en 40 puntos. Alrededor de esa cifra podría estar la salvación, es decir, que los de Manolo Sanlúcar tendrían que sumar 31 -tienen 9-. Esto es más del triple de lo logrado hasta el momento. Es por eso que el 2018 ha sido un ascensor que ha hecho subir a 2ªB y que, desde agosto, solo sabe bajar muy progresivamente.