@SuarezRMarca | Aquella frase del verano que por repetida fue hasta creída, "este Málaga tiene más gol que la pasada temporada", parece un sacrilegio en la actualidad. Como si se tratase de una más de las incumplidas promesas tuiteras del Sheikh, lo del olfato goleador de los blanquiazules va camino de batir todos los records negativos del club.
Sólo cinco goles en once jornadas, sólo dos partidos de once en los que el equipo ha marcado, sólo tres jugadores saben lo que es anotar de los veintiuno que ha utilizado Javi Gracia. Y así se encuentra el Málaga en una crisis de resultados y de juego que han llevado a la desesperación y al hartazgo a la afición, cansada de que el gol no aparezca por La Rosaleda. Y duele más viendo cómo dos futbolistas que estaban atados, a golpe de click se podría decir, se salen con sus respectivos equipos. Son Javi Guerra y Borja Bastón, del Rayo y del Eibar.
El primero no está en su tierra, como lo hizo en la segunda vuelta de la pasada campaña, porque la dirección deportiva no quiso esperar hasta que rescindiera su contrato con el Cardiff. Gracia lo quería, pero Husillos dijo que no se podía arriesgar a que luego se quedara en Gales. Se lo llevó el Rayo y ahí la está liando parda con 8 goles, y sin tirar penalties ni nada.
En cuanto a Bastón, propiedad del Atlético de Madrid, el futbolista ya había dado su consentimiento a la cesión, pero en el Málaga dudaban de su adaptación a Primera división y apostaron finalmente por Duje Cop. Las comparaciones son odiosas, desde luego, pero reales. Borja lleva 6 tantos, el croata aún no se ha estrenado.
