El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aprobará mañana en un excepcional Consejo de Ministros una serie de medidas durante 15 días ante la pandemia del COVID-19. El estado de alarma lo recoge el artículo 116 de la Constitución Española y la Ley Orgánica 4/1981. El más leve de los supuestos en caso de extrema emergencia, detrás de los grados de excepción y sitio. ¿Cómo puede afectar esta situación al fútbol?
El estado de alarma facilita al Ejecutivo decisiones tales como limitar la circulación o permanencia de personas en lugares y momentos concretos. Asimismo, es posible adoptar todas las normas posibles para combatir enfermedades infecciosas como la que se presenta. Un plazo máximo de 15 días prorrogables de aprobar por la Cámara baja. Este es el tiempo mínimo en el que el balón no va a rodar.
Hay que partir de la premisa de que el fútbol no es algo a tener en cuenta ahora mismo. LaLiga suspendió toda su actividad tras el positivo por coronavirus de Trey Thompkins, jugador del Real Madrid de baloncesto. Una decisión que fue tomada por la presión de la AFE y la postura de la Federación de frenar. Todo está en manos de cómo vaya avanzando el virus a lo largo de las próximas dos semanas para saber cuánto va a estar el tiempo del marcador parado.
Una situación que, naturalmente, afecta al Málaga. Los Servicios médicos del club blanquiazul han cancelado los entrenamientos hasta el próximo martes por precaución «siguiendo los parámetros de las autoridades sanitarias». El vestuario y la directiva están completamente de acuerdo ante la excepción en la que se encuentran tal y como han declarado por redes sociales.
