@Danielnz97 || Capítulo primero de mayo y el Unicaja seguía buscando estrenarse a domicilio en la competición liguera en este 2019. Con la cuarta plaza lejos tras la derrota en Lugo y el ridículo en Valencia, asegurar los playoffs e intentar, dentro de los mismos, estar lo más alto posible era y es ya la ilusión de este equipo. Pero para ello había que ganar este miércoles, Día del Trabajador. Y si a los verdes les podían sentar bien el triunfo -por ser Estudiantes un rival inferior y por romper así la mala racha lejos del Carpena-, al conjunto de la capital le permitía escapar, o hacer el ademán por lo menos, del abismo del descenso, a solo un partido. Y todo eso sin su estrella, Darío Brizuela (14.7 puntos, 1.7 rebotes y 3 asistencias para 13.3 de valoración), que tuvo que ver el encuentro desde la grada por un esguince del ligamento lateral externo de su rodilla derecha. El Unicaja, por su parte, llegaba sin Carlos Suárez por una rotura en el isquiotibial de su pierna derecha.
Salió decidido el cuadro cajista. Al contrario que el domingo frente al San Pablo Burgos (1-8), al que, solo al final, pudo superar el Unicaja (91-70). Buena entrada al encuentro para colocar un 2-8 en apenas dos minutos. Milosavljevic inauguró el marcador con un triple y Wiltjer se apuntó cinco puntos de una atacada. Whittington frenó el intento de brecha de los de Casimiro y redujo a dos la diferencia. Casi un juego de tú a tú entre el estadounidense con pasaporte macedonio, incorporado en diciembre del pasado 2018, y el ala-pívot del conjunto malagueño. En eso parecía convertirse un primer cuarto muy igualado. Clavell y Vicedo aparecieron por los locales; Shermadini y Lessort por los visitantes para, finalmente, dejar el resultado en un tenso 21-21.
El segundo cuarto no fue muy diferente al primero. Ningún dominador claro. Ni en el juego ni en las estadísticas. Hakanson llegó para quedarse y Alberto Díaz apareció en escena. Cogió protagonismo Mathías Lessort, que fue el que cerró el primer acto con una canasta de dos. Cook, el ex del Unicaja, se prodigó en asistencias. Ocho en solo 20 minutos. Firmó 223 con el equipo de Málaga en la 2009/2010. Y el 3 de enero de aquel último año, un histórico 43 de valoración ante el CB Granada. Nada podía sorprender ya al equipo de la Costa del Sol. El acierto de Roberts -con seis de ocho intentos superados de cara al aro- y las acometidas de Lessort -con un 2+1 al borde del descanso- permitieron imponer un 38-42 que quedó reducido en la última posesión a un ajustado 40-42.
Con dos triples comenzó el Unicaja el tercer cuarto. Wiltjer, que se colocó como el máximo anotador de los suyos con 13 (lo fue también al acabar, con 17), y Jaime, con poca presencia hasta el momento, iniciaron la huida de los malagueños. Arteaga trató de poner el freno con seis puntos consecutivos, pero el imponente arranque de los visitantes no tenía remedio. Shermadini hizo sangre y Milosavljevic culminó la faena con un triple que alejó al conjunto de Casimiro hasta los 11 puntos (46-57). Kyle Wiltjer aumentó la ventaja en dos más tras coger un rebote ofensivo y no fallar en el tiro. Reaccionó el Movistar Estudiantes, que en ese momento no echó en falta las bajas de Brizuela, Sutton y Gentile, con una canasta de Lampropoulos, un gancho de Whittington y un triple de Cook para reducir a la mitad el arreón de los de Casimiro (53-59). Anhelaban ya los del sur el final (de este tramo en especial). Del sol a la tormenta en solo unos minutos. Al final, parcial de 12-2 para dejar el marcador en 58-61.
Salin y Lessort hicieron olvidar lo ocurrido en la segunda mitad del tercer cuarto. Comienzo ilusionante para devolver una renta cómoda (58-68). Díez anotó de dos para aumentarla y colocarla en +12. Como si nada hubiera pasado. El Unicaja volvía a comandar. Ahora con mucho menos tiempo por delante. Whittington (que acabó con 24 puntos) y Hakanson trataron de calcar el guion que se dio minutos antes y redujeron a cinco la diferencia en el electrónico (65-70). Quedó todo en ilusión porque dos tiros libres de Gio Shermadini y un triple de Jaime Fernández, cuando más le necesitaba su equipo, volvieron a colocar a los cajistas una decena por encima de los madrileños (65-75). El intento de alcanzar la heroica por parte de los locales se esfumó y el conjunto malagueño logró en el WiZink Center su primera victoria a domicilio del 2019 (72-80).