El Málaga realizó la penúltima sesión de la semana antes de la visita del Tenerife a Martiricos. Los de Pellicer, que se ejercitaron durante algo más de hora y media, recibieron buenas noticias en la sesión. El entrenador de Nules vio con sus ojos como Mejías volvía a entrenar con el grupo dejando atrás la alarme que generó su ausencia este jueves. Con Lombán fuera de juego por culpa del COVID-19, el entrenador malaguista ha estado a punto de quedarse cojo en el en eje de la zaga. Por lo tanto, Mejías, sí; Hicham, no.
Hicham se ausentó de la sesión por problemas musculares. El extremo marroquí sufre dolor en el bíceps femoral y eso le impidió estar con el resto de sus compañeros. Ismael Casas y Ramón también fueron ausencias. Ambos canteranos siguen con sus problemas de lesiones. El de Linares sufre un esguince de grado II mientras que Ramón continua con los problemas en el glúteo, esos que le tienen KO desde hace ya dos semanas.
Acompañando a los dos canteranos en el apartado de bajas están el propio Lombán con su proceso de coronavirus y Orlando Sá, ausente por motivos personales. Gonzalo, Alberto Quintana, Julio y Larrubia no entrenaron con el primer equipo, Los canteranos preparan ya con el filial su duelo de esta semana en Melilla en un duelo clave para el posible ascenso a Segunda B. El entrenamiento estuvo centrado en el trabajo físico en la primera mitad de la sesión y también en el trabajo táctico con el que finalizó el día de trabajo blanquiazul. El resumen es que Mejías da un paso adelante a la vez que Hicham lo da atrás.