El Málaga perdió, sí, pero la actitud del equipo nada tuvo que ver con la de alguna de las últimas derrotas sufridas por el cuadro costasoleño. Pellicer apostó por un once muy ofensivo con hasta cinco jugadores de ataque del centro del campo en adelante. Dos nombres brillaron por encima del resto pese a que la fortuna no sonrió a los blanquiazules en la parcela ofensiva. Yanis Rahmani y Joaquín Muñoz, señalados indirectamente en los últimos choques, fueron los mejores del Málaga en la punta de lanza. Corrieron, regatearon, lucharon y solo faltó el gol.
Rahmani comenzó el partido muy serio. Cada pelota que tocaba el extremo francoargelino fue un verdadero peligro en el primer cuarto de hora. Casi hace el cero a uno en fortísimo disparo lejano que obligó a Mariño a hacer una de las paradas de la jornada 25 en LaLiga SmartBank. Es cierto que el paso de los minutos le quitó energía. Aún así tuvo tiempo de salir en otra de las fotografías de la jornada en una acción que pudo acabar en penalti. Las cifras del extremo malaguista le colocan como el jugador que más regates intentó en el partido.
Joaquín recuperó la titularidad dos jornadas después. El de Miraflores no estuvo en el once ni en la victoria contra el Alcorcón en Santo Domingo ni en la derrota contra el Zaragoza en La Rosaleda. El malagueño fue prácticamente incombustible durante todo el partido. Se le pudo ver por la derecha y por la izquierda. Dejó detalles de calidad en forma de algunos buenos controles. Paso adelante para un Rahmani y Joaquín que se antojan claves en el último tercio de campeonato. Las cuentas dicen que el Málaga necesita al menos 19 puntos más para no pasar los apuros que tuvo que vivir el curso anterior. La dinámica no es buena, pero el partido en El Molinón no estuvo mal.
