Se puede decir más alto, pero no más claro. Fotis Katsikaris ha insistido en un claro mensaje a la directiva del Unicaja: «Necesitamos alguien que nos ayude porque tenemos un problema, especialmente contra estos equipos tan físicos. Y ayudaría también a mejorar al resto de hombres altos, es algo que el equipo necesita ahora mismo», ha comentado tras la derrota en Nanterre.
El equipo francés, muy físico y atlético, ha vuelto a descubrir la endeblez de este Unicaja. «Echamos en falta físico, presencia en la zona, Alberto Díaz no está al 100% y es muy importante para nosotros. Sólo tenemos en la pintura a Nzosa, que tiene 17 años. Es un talento, pero no podemos tener grandes expectativas porque es sólo su primer año como profesional aunque el chaval está haciendo un gran trabajo. ¿Y sabes? nosotros tenemos jugador de talento, con experiencia, pero no tomaron las mejores decisiones en ataque».
En ese sentido, una vez más han vuelto a no saber jugar los últimos minutos. «Comenzamos mal en el uno contra uno, sin controlar el rebote. Corregimos lo del rebote en el segundo cuarto y cuando el partido estaba por decidirse en el último cuarto, tuvimos como cuatro situaciones de buen tiro y fallamos todas. Ese es el ejemplo de cómo está psicológicamente el equipo ahora mismo».
No es algo nuevo para el griego, que aún no sabe lo que es ganar con el Unicaja. «No es la primera vez que esto pasa. Ha sido un partido igualado, hemos tenido opciones de ganar, pero si tú juegas en defensa y no controlas el rebote… y haces faltas y te tiran 31 tiros libres con un gran porcentaje, tienes un gran problema. A 6 minutos del final ganábamos de 7, ellos anotaron con un rebote ofensivo y volvieron al partido. En ese momento estábamos controlando el partido en ataque y defensa, pero este rival tiene mucho talento ofensivo y son más atléticos que nosotros».
La única receta para Katsikaris es la del trabajo en los entrenamientos y tener la recompensa de una victoria. «Necesitamos ganar, el equipo necesita ganar. Todos estos malos momentos están hiriendo al equipo. Necesitamos tomar las mejores decisiones en ataque en los últimos dos minutos de los partidos igualados. No importa cómo, tenemos que ganar. Si ganamos tendremos confianza».