La llegada de Alexander González es inminente. El fichaje del defensa venezolano debe hacerse oficial en las próximas horas y para ello el Málaga ha tenido que cumplir algunos pasos previos antes. Uno de ellos ha sido la baja federativa de Iván Calero. LaLiga dio el OK a que los malaguistas diesen de baja al ex del Numancia y firmasen a su sustituto. La lesión del carrilero en Almería activó toda una serie de alarmas que se confirmaron a los pocos días. No es la primera vez que el Málaga tiene que dar la baja federativa a algún jugador para hacer hueco en la plantilla.
En 2017 fue Juankar el que cayó gravemente lesionado. Era finales de noviembre cuando el madrileño chocó con Lucas Vázquez en un partido disputado en el Santiago Bernabéu. Las sospechas de una lesión grave se confirmaron a los pocos días y Juankar sufría una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. El 7 de diciembre, el club de Martiricos hizo oficial la llegada de Ignasi Miquel y la baja federativa de Juankar, tal y como va a ocurrir con Iván Calero en esta temporada 2020-2021.
Otro caso más antiguo es el de Iván Leko. En la temporada 2004-2005, el Málaga estaba en zona de descenso y sufría un grave problema de gol pese a contar con Amoroso y Wanchope entre sus filas. El club decidió fichar a Fernando Baiano. El delantero brasileño ocupaba plaza de extracomunitario y el club ya tenía a tres en su plantilla. Entonces hubo que dar de baja al mediocentro croata para hacer hueco al atacante. El movimiento fue clave ya que los nueve goles de Baiano en la segunda vuelta certificaron la permanencia de los de Tapia. La baja federativa a Calero no es un movimiento novedoso sino uno que se repite cada cierto tiempo.