Es el único fichaje que no ha debutado todavía como blanquiazul. Ganas no le falta ni a él ni a los aficionados malaguistas. Joaquín Muñoz es el hombre de la semana y donde apuntan los focos. Su estreno podría ser este mismo fin de semana, aunque no en La Rosaleda como él hubiese deseado.
Pero lo importante es que su momento llegará. Cumplirá un sueño que veía muy difícil el último día de mercado: «Los últimos días de mercado lo pase mal. Te desenfoca no saber dónde vas a jugar la próxima temporada. A mí me llamaron el último día a las 11:15. Yo tenía el coche preparado a dos manzanas de las oficinas de La Rosaleda porque tenía la esperanza de que esa llamada iba a entrar».
Por suerte para todos, la operación se realizó con éxito. Hoy está en el lugar que desea y con la esperanza de mostrar su mejor nivel. Pero detrás de todo el camino hay lágrimas, mucho esfuerzo y una mentalidad fuerte para superar todos los obstáculos. Él mismo aconsejó de esta manera a todos los niños que luchan por cumplir el sueño de Joaquín: «El único consejo que le puedo dar a los niños es mantenerse fuerte de mentalidad porque va a ver momentos duros en el camino. Y, sobre todo, trabajar duro. El trabajo duro siempre paga».
Siendo un niño de 15 años, el de Miraflores aterrizó en Madrid para vestir la camiseta del Atlético. «Desde primera hora me dijeron que era mi vida y que tomase la decisión conveniente. Cuando llegaron todos los clubes, yo me decidí por el Atlético, estoy muy agradecido con ellos«, agradecía el extremo al club que le hizo jugador.
Por último, habló sobre su relación personal con los componentes del vestuario malaguista. A pesar de llevar solo un mes, ya tiene buena amistad con muchos de ellos: «Tengo muy buena amistad con todos, soy muy amigable. Creo que es una virtud, te hace abrirte mucho más a las personas y acomodarte rápidamente a un lugar».
