El amarillo es sinónimo de alegría, optimismo y energía. Precisamente, todos estos atributos lo extrapoló el Málaga CF al verde del Nova Creu Alta en el estreno de la tercera equipación de esta temporada. Hasta el momento, solo la blanquiazul y la verde y morada se habían lucido. En esta ocasión, a causa de la indumentaria del Sabadell, los boquerones debutaron con la amarilla… y con victoria.
Tres puntos que sirven para que los de Pellicer cuenten con 17 puntos en los bolsillos. Un arranque de notable para un equipo que no pensaba, ni por asomo, tener tantos puntos a estas alturas de la campaña. Ahora, y a falta de que los rivales disputen sus respectivas jornadas, el Málaga sería quinto clasificado de LaLiga SmartBank.
Los primeros dos goles con la camiseta amarilla tuvieron la firma de Calero y Chavarría. El carrilero, que jugó a pierna cambiada con lo que ello supone, fue de los mejores del partido. Se estrenó también él como anotador blanquiazul. La combinación con Jairo tuvo como postre final un buen disparo cruzado que puso el 0-1. En el 75’, en una acción idéntica al tanto en La Romareda, el argentino cabeceó a la perfección el centro de Yanis para poner el segundo y, en consecuencia, regalar la victoria a un Málaga que estrenó camiseta en tierras catalanas.
