Una temporada atípica, pero a la que se le empieza a ver la luz al final del túnel. Elche y Girona lucharán por el sueño de Primera. Los cuadros de Pacheta y Francisco vencieron a Zaragoza (0-1) y Almería (1-2), respectivamente, para llegar a la final a doble partido del playoff de ascenso. Nino, en clave ilicitana, y Samu Saiz y Cristhian Stuani, por parte de los rojiblancos, le dieron a sus compañeros las alas para superar al rival y escalar hasta el último peldaño. Un duelo en el que ambos acabarán llorando. De felicidad o tristeza.
Lo bonito del fútbol es que lo que parece imposible se puede hacer realidad. Era el equipo con el quinto presupuesto más bajo de la categoría a principios de curso. Un combinado que aspiraba a la permanencia. Frente al Zaragoza, favorito en la eliminatoria. Ante todo esto, Nino se hizo enorme, tiró de veteranía y conectó un remate por bajo que dejó sin opciones de reacción a Cristian Álvarez. Kagawa y Javi Ros tuvieron las más claras en lenguaje blanquillo.
Méritos a Édgar Badía. El guardameta blanquiverde paró el penalti a lo panenka del ’10’ maño. Aguantó y aguantó hasta que abrazó el cuero. Fidel estuvo cerca de marcar uno de los goles del año con una falta lejana. Un misil de largo alcance desde el perfil diestro con el que Cristian Álvarez se lució y voló para despejar, con la ayuda del palo, la pelota. Un gol encajado y el penalti fallado. Dos balazos de los que no supieron reponerse los pupilos de Víctor Fernández.
El Girona quiere volver a su sitio un año después
Los catalanes tienen la opción de regresar a la máxima categoría del fútbol español en la temporada siguiente a su descenso. Desde los primeros compases, el Girona pegó un puñetazo en la mesa gracias al tanto de Samu Saiz. Sivera pudo hacer más para evitar el gol visitante. No obstante, el Almería no había dicho su última palabra. José Carlos Lazo, al que se le vinculó con el Málaga en el pasado mercado estival, ejecutó a la perfección el pase de Darwin Núñez para dar esperanzas a los indálicos.
No fue suficiente. El Girona, en líneas generales, ha sido superior al Almería en la eliminatoria. Y un protagonista. El de siempre. El que aparece cuando lo necesitas. El que lleva 31 goles esta temporada. Cristhian Stuani clavó el puñal en el 84′ gracias al regalo de Samu Saiz tras un magistral pase entre líneas de Borja García. Todo esto con los andaluces en la otra cara de la moneda. Con cinco entrenadores en una sola temporada, el tiempo dirá en qué dirección navegará el proyecto de Turki Al-Sheikh en los mandos de la nave indálica.
