El director deportivo del Málaga tiene muchos frentes abiertos. Por un lado, intenta que los jugadores se centren en la reanudación del campeonato. Por otro, tiene que lidiar con el futuro más inmediato de la plantilla y del club. Y entre otras preocupaciones, lo que más le quita el sueño a Manolo Gaspar, como ha comentado en Radio Marca Málaga, es la inscripción de los canteranos que dejan o dejaron de ser sub23.
«Eso es lo que más tiempo me quita, la verdad», ha reconocido Manolo. Él asegura que está trabajando sin descanso en ese asunto para que Luis Muñoz, Mula e Iván Rodríguez puedan jugar en el Málaga con ficha del primer equipo. «En eso me está ayudando mucho José María Muñoz, que habla mucho con Liga y Federación, para ver qué mecanismos podemos tener».
Y es que las limitaciones económicas -sólo puede inscribir en el primer equipo a futbolistas por el salario mínimo- chocan con la realidad de estos canteranos muy por encima de ese sueldo base. «Son jugadores muy importantes. Era una obsesión para mí poderles encontrar un equipo en enero a Mula y a Iván y que compitieran esta temporada. En eso estamos. No vamos a dejar de pelear y buscar soluciones para que estos jugadores, que son nuestros, puedan seguir con nosotros el año que viene«.
LOS ALTOS SALARIOS EN LA PLANTILLA
También de cara al próximo año hay algo que no se le va de la cabeza a Manolo. Cómo cuadrará el tope salarial. Tiene comprometidos muchos millones de euros en fichas de jugadores y se espera un desfase de 15 millones de euros en el límite salarial.
«Todavía no conocemos todas las informaciones para planificar la próxima temporada. Ningún club lo sabe. Ahora, LaLiga y la Federación están centradas en la vuelta a la competición. Después, ya se pondrán con todos los clubes sobre el límite salarial, lo que arrastra cada uno, cómo le ha afectado el Covid-19 según el número de socios, etcétera», ha explicado Manolo.
Sin embargo, sí ha reconocido que la situación es difícil. «Claro que preocupan los sueldos altos, pero ahora lo veo muy lejos. Estamos a 3 puntos del descenso y no sabemos en qué categoría jugaremos. Incluso podríamos tener una buena racha y entonces por qué no podemos plantearnos subir. Eso sería la solución a todos los niveles. Lo que pase en verano lo iremos viendo cuando esto termine y veamos dónde estamos y cuál es el escenario real que tenemos», ha dicho.
Mientras, Manolo Gaspar, al que nada le quita el sueño, tira de optimismo y de trabajo, muchas horas en su particular cueva.
