BATACAZO ANTE ESTUDIANTES (78-68)

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Unicaja se pega un tortazo en Madrid // acb.com

@JuanjeFernandez || Una montaña rusa con más descensos que ascensos. Así fue el fatídico partido que jugó Unicaja ante Estudiantes y donde, como prueba de ello, firmó 26 puntos en los dos primeros cuartos. Poco se puede salvar del encuentro cajista que deja a Casimiro de nuevo en la picota a pocos días de la Copa del Rey. Unicaja no encuentra el camino de la regularidad y de ello aprovechó un Estudiantes que coge aire a costa de los malagueños. 

 

Unicaja arrancó el partido en el WiZink Center con muchas dudas. Adams y Jaime Fernández anotaban para el cuadro malagueño pero los de Casimiro no encontraban la comodidad y Avramovic amenazaba con amargar la tarde a sus antiguos compañeros. Los estudiantiles dominaban el rebote mientras que el juego interior en ataque tampoco era gran cosa para los malagueños. Adams era el único acertado desde fuera y de eso vivía un Unicaja que tardó muchos minutos en quitarse los topes. La pobre anotación de los dos equipos convirtió la primera parte en un aburrido espectáculo. Arteaga y Scrubb daban ventaja al Estudiantes ante un Unicaja que alcanzaba las diez pérdidas al final del primer cuarto. (21-14)

 

Unicaja salió todavía peor al segundo cuarto. Los colegiales infligieron un parcial de 8-0 que, unido al final del anterior tramo, dieron una renta de quince puntos a los de Javier Zamora. Arteaga y Douglas estaban haciendo lo que querían sobre la pista y obligaron a Casimiro a pedir de nuevo tiempo muerto. El manchego no daba crédito a la desconexión de su equipo. La brecha era cada vez más amplia en favor de un Estudiantes dispuesto a sacar petróleo de la situación. Ni Thompson, Toupane o Alberto Díaz protagonizaban diversos tiros fallados desde la línea de 6,75 dejando el porcentaje cajista en un paupérrimo 10% de acierto en triples. Palacios también se sumaba a la fiesta madrileña y el Unicaja, que ni en tiros libres acertaba, se marchaba hundido al descanso. (47-26)

 

Casimiro pedía intensidad y energía a sus jugadores en el descanso y estos le defraudaron. El guión cambió pero el partido seguía siendo para el Estudiantes, que consiguió que solo se anotara una canasta en cada aro de la pista después de los primeros tres minutos tras la reanudación. Gerun era el único jugador costasoleño que parecía dispuesto a evitar que su equipo siguiese desangrándose. Adams y comandaba un parcial de 0-13 para el Unicaja que acercaba a los malagueños a esa fina línea de la épica en la que tan bien se está moviendo este curso el cuadro de Los Guindos. Palacios ponía punto y final a la racha y provocaba le reacción del pabellón para los suyos. Unicaja continuó con el pico y la pala y un triple de Jaime Fernández puso la guinda al tercer cuarto cajista colocando a los suyos a cinco. (60-55)

 

Alberto Díaz anotaba un triple nada más comenzar el último cuarto y ponía a Unicaja a tiro después de muchos minutos cocinando la remontada. Cuando los malagueños parecían tenerlo cerca aparecieron los fantasmas del primer cuarto. Primero, con un ‘airball’ de Brizuela, mal partido el suyo, y luego, con dos acciones de tres puntos para los de Zamora lideradas por un gran Avramovic que ponía de nuevo muy lejos a los del Carpena. La montaña rusa de Unicaja subía y bajaba haciendo imposible la remontada. El tiempo fue transcurriendo y la derrota malagueña se confirmó en uno de los peores partidos de la temporada.