@Pedromartinper | Han pasado 21 días de mercado invernal y el teléfono de Manolo Gaspar y de las oficinas del club ya echan humo. Operaciones resueltas y aun muchas por resolver. Ya se hicieron efectivas las salidas de dos canteranos cuyo trato por parte del Málaga fue deleznable. Mula e Iván Rodríguez podrán disfrutar hasta final de temporada de lo que más aman, dar patadas al balón después de encontrar destino en Alcorcón y Ponferradina respectivamente. Solo queda de ese trío sin ficha José Rodríguez, con un salario importante y con novias, sobre todo, en el fútbol holandés.
Pero de manera simultánea se trabaja en otras índoles de igual calado e importancia. Lo son para salvaguardar los intereses económicos del club las salidas que sí sirven para regular el desfasado límite salarial. Las posibles ventas de Antoñín y Keidi, los que más dinero dejarían en las arcas blanquiazules, podrían solventar el inmediato presente del cuadro boquerón, aunque restan solo diez días para el cierre del mercado.
Para entonces, Manolo Gaspar espera incorporar a algún futbolista a la plantilla para subir el nivel de la misma, aunque el mercado al que ojea los blanquiazules no son atractivos para el público, por nombres y categorías de procedencia. Pero para entrar, primero hay que salir. Jugadores como Lorenzo, tentado según ElDesmarque por el Saint Gallen suizo y el Clermont francés, Rolón o Keko, los cuales no cuentan para el entrenador o que no desean seguir vistiendo la elástica malacitana, serían la llave a nuevas incorporaciones, puesto que liberarían ficha profesional.
También están encima de la mesa renovaciones que urgen antes de que se adelanten otros equipos, como el caso de Luis Muñoz. En definitiva, numerosos frentes abiertos que han de cerrarse antes de que el mercado invernal finalice. Diez días de trabajo intenso para mejorar una situación caótica dentro de las oficinas de La Rosaleda.
