@Danielnz97 || El Málaga nunca antes había tenido el ascenso directo a más de dos puntos. A esa distancia había estado en la jornada 16, en la 20 y en la 25, pero nunca a tres como ahora. Para más inri, los blanquiazules tienen el golaveraje particular con el Osasuna -líder con 44- y el Granada -segundo con uno menos- perdido, aunque todavía tiene que jugar el partido de vuelta contra ambos. De hecho, el próximo encuentro es frente a los pamplonicas y, dentro de prácticamente un mes, ante los nazaríes. Eso sí, estos últimos tienen ya en su haber el encuentro de vuelta frente al Reus, mientras que los de Muñiz no.
Esto quiere decir que el ascenso directo está ya a dos partidos. El Málaga no regresará a dicha zona hasta, al menos, dentro de dos jornadas. Si el equipo de Juan Ramón López Muñiz quiere pelear por esas dos posiciones, está casi obligado a vencer al cuadro rojillo, que de ganar se iría a los 57, mientras que si no pierde conservaría el golaveraje particular. Le llega el primer match-ball el lunes al conjunto de la Costa del Sol, que de no haber marcado el Lugo en el descuento, hubiese visto cómo el séptimo clasificado -el Oviedo- se hubiese acercado más que nunca (a cuatro puntos). El empate entre gallegos y asturianos mantiene la renta de seis para tranquilidad de la afición malaguista, descontenta con los últimos resultados de los suyos.