@JuanjeFernandez || La situación entre el Málaga y Rosales ha llegado a su límite. El lateral venezolano ha sido apartado del grupo tras su falta de actitud durante la última semana. Es bien sabido, y así lo hemos venido contando en la radio del deporte, que el defensor no estaba dispuesto a jugar en Segunda División este curso. Muñiz, al que no le ha gustado las maneras del futbolista en los últimos entrenamientos ha cortado por lo sano y tras no darle un solo minuto en los amistosos ante el Atlético Malagueño y Mallorca le ha enseñado la puerta de atrás de manera rotunda.
La pelota ahora se encuentra en el tejado del jugador y su representante. El futbolista ya sabe que no hay vuelta atrás posible y que tiene que abandonar el cuadro de Martiricos sí o sí. Muñiz espera con los brazos abiertos la llegada de Jesús Gámez o en el peor de los casos la del canterano del Barcelona Balliu. Las próximas horas serán importantes para ver el final de un culebrón que de momento mantiene en vilo el carril diestro malaguista. La salida de Rosales obliga a reforzar la posición mientras el canterano Iván Rodríguez sigue ganando enteros por delante de Miguel Torres para ser el suplente en ese puesto.
Con Juanpi no ha cambiado tampoco nada. El jugador tendrá que buscar acomodo tras no participar en los últimos partidos por unos supuestos problemas físicos. Su agente Juan Mata tendrá que llevar una oferta interesante a La Rosaleda después de que se haya cerrado el mercado inglés sin éxito para su salida.
