@JuanjeFernandez || El Málaga ha finalizado la pretemporada y es tiempo de balances antes de que la semana corra como el viento y el partido ante el Eibar del próximo día 21 de agosto en La Rosaleda se eche encima de los blanquiazules. El cuadro de Martiricos, al igual que sus otros 19 rivales del campeonato nacional, intenta buscar la mejor versión de cara a la temporada 2017-2018 por lo que las pruebas en el once costasoleño no han dejado de sucederse durante las seis semanas que ha durado la preparación. Si algo han tenido en común los últimos veranos malaguistas ha sido la aparición de canteranos en el primer equipo.
Míchel no ha faltado a su palabra, aquella que tuvo a finales del curso pasado y donde prometió que el equipo malagueño estaría en total contacto con sus jugadores más jóvenes. El madrileño no se ha cansado de repetir una frase que ha calado en la infraestructura de una Academia que espera que en enero arranquen las obras de la Ciudad Deportiva de Arraijanal. "Siempre he defendido que queríamos una plantilla corta y versátil para que todos nuestros jugadores puedan ayudar. 21 o 22 jugadores y el resto canteranos". El técnico costasoleño no ha dudado en hacer de esa frase su bandera y lo ha demostrado a lo largo de las tres fases que el Málaga ha tenido durante la pretemporada.
La lista de canteranos que han actuado con el primer equipo es extensa: Samu Casado, Kellyan, Iván Rodríguez, Ian Soler, Luis Muñoz, Alberto López Álex Robles, Maty, Arturo, Deco, José Carlos, Kuki Zalazar, Alex Mula, Jack Harper, Ontiveros, En-Nesyri, Hicham y David Ramos. 18 futbolistas -daría para una convocatoria de partido oficial- que gracias al preparador de Martiricos han comenzado a vivir el sueño de sus vidad. Algunos de ellos han sido incluso habituales en el once del equipo malacitano. José Carlos, Mula o Maty han sumado más de 200 minutos, siendo el extremo de Barcelona una de las sorpresas más agradable de este periodo estival.