@SuarezRMarca | Miguel Torres, que ejerció como capitán en la vuelta de 1/16 ante el Córdoba, volvió a verse obligado a pedir disculpas a la afición. "No queda otra que animar a los compañeros ahora en el vestuario y pedir disculpas porque hoy ha estado inmensa con nosotros en una situación complicada. Sólo nos queda seguir trabajando", indicó al finalizar el partido en Bein Sports.
El defensa madrileño, que jugó de central, insistió en su idea de que el público estaba en su derecho de pitarles tras el mal partido realizado. "Ellos son los que juzgan. Cuando trabajamos bien son los primeros que nos felicitan y está bien que nos den un toque de atención. Esto es responsabilidad nuestra, pero también del cuerpo técnico, de la directiva, de todo el club. Somos una familia para lo bueno y para lo malo. Es una pena terminar el año de esta manera porque no vamos a tener partidos hasta dentro de bastantes días. Esto nos hace volver a querer trabajar fuerte para mejorar", espetó.