«Un bochorno inadmisible en Albacete»

Pues como era de esperar desde hace semanas, y esperemos que pare aquí, llegó el día en el que los futbolistas y el entrenador del Málaga CF avergonzaron a la afición malaguista y no pudieron caer más bajo ni defender peor la camiseta que llevan puesta, muchos de ellos sin mérito alguno para portarla, y el escudo que esta representa. Ya no se trata de jugar mejor o peor, o de tener un mínimo de inteligencia para que desde el banquillo de Sergio Pellicer lleguen las órdenes oportunas a los “jugadores” dentro del terreno de juego y éstos las ejecuten, sino de poner entre todos un mínimo de interés y concentración en lo que están haciendo por lo menos.

Ayer además con “rifirrafe” incluido entre el de Nules y nuestro delantero Dioni, éste último defenestrado durante semanas sin explicación alguna por el “mister” en favor de no se sabe que probaturas inexplicables y que no han funcionado. Cuando con superioridad numérica de 10 jugadores contra nueve del Albacete fue sustituido pues nuestro goleador de referencia estalló de rabia e impotencia. Casi como estallamos todos con un técnico que ya ha perdido demasiados partidos esta temporada por culpa de sus planteamientos previos de los partidos y cambios durante los encuentros incomprensibles y que le han costado al equipo demasiados puntos y casi todos en lo que va de segunda vuelta de la Liga Hypermotion.

Nueve puntos de treinta posibles son números de descenso directo y hay que sumar no menos de once puntos más para no descender, a este ritmo difícil por no decir imposible. Bochorno del Málaga CF en Albacete donde no se libró ni el “santo” Alfonso Herrero que lleva unos encuentros realmente bajo de forma, igual es el momento de darle una oportunidad a Carlos López. Como era de esperar, muy agradecido por su incompetencia y nula capacidad de reforzar al equipo en el mercado invernal señor Loren Juarros, director deportivo del club, a los más jóvenes ya les tiemblan las piernas y se les nublan las ideas e incluso hacen idioteces propias de la inexperiencia como Izan Merino ayer.

Para mi no es tarjeta roja pero tal y como se pusieron las cosas con las dos expulsiones en el conjunto de Alberto González fue una temeridad innecesaria la acción del canterano. Por cierto, baño táctico del míster malagueño de Tolox al de Nules, para desgracia de Pellicer no es la primera vez y mucho me temo que no sea la última. “Esto es lo que hay”,  frase que odio terriblemente porque representa conformismo y rendición y ni una cosa, ni la otra se puede permitir el malaguismo porque nos condenaría a un descenso sin remedio. Así que desde este momento, tal y como hice la temporada pasada con lo que denominé  “la Conjura del ascenso”, me pongo manos a la obra e inicio hasta que tengamos los puntos de la permanencia lo que denomino desde ya: “la Conjura de la permanencia”.

Olvidemos todos la desgracia de la intervención judicial que nos ha caído encima como una de las “siete plagas de Egipto”. Tenemos una final el próximo sábado frente al Racing de Ferrol y hay que ganar sí o sí. Para bien o para mal estos son los futbolistas que tenemos y a ellos apelo para que asuman su responsabilidad con nuestra camiseta y el escudo que portan en el pecho. Al míster Pellicer le ruego que se resetee y vuelva a ser el del ascenso “milagroso” y el de la primera vuelta.

Es obvio que nuestra plantilla no es la mejor de la categoría pero tampoco es tan mala como viene demostrando hace bastantes jornadas. Al director deportivo Loren Juarros, al director general Kike Pérez y al administrador judicial José María Muñoz, les pido que se centren en la permanencia del Málaga CF en la categoría y entierren sus cuitas con el míster, representantes o futbolistas que terminan contrato y puedan marcharse al finalizar la temporada. “TODOS A UNA”, otra vez. Hay que llevar a buen puerto al club y una vez más la afición junto a los medios de comunicación, más allá del natural cabreo o indignación por partidos como el de ayer, tenemos la responsabilidad de ir juntos en esta complicada travesía que vuelve a tener que recorrer el malaguismo. La afición malaguista no se merece lo que está pasando desde hace muchas temporadas pero tampoco nos dijo nadie que ser del Málaga CF fuese tarea sencilla.

Toca llamar a rebato y a poner en práctica más que nunca la canción de “la gitana”, que nos vuelva a echar las cartas y no nos quite la alegría del ascenso milagroso de la temporada pasada en Tarragona. Una vez más volvamos a llenar el estadio de La Rosaleda el próximo sábado y llevemos al equipo en volandas. Eso sí, cuando se consiga la permanencia, cuestión en la que creo firmemente, que rueden las cabezas que tengan que rodar bajo la guillotina de la terrible realidad que su Señoría la Jueza María Ángeles Ruíz tiene secuestrado y condenado a nuestro Málaga CF. Una justicia lenta, ni hace justicia, ni se la merece el malaguismo en modo alguno.

¡Memoria, Compromiso y Fe!, sobre todo esto último.