Un Málaga de remontadas… en contra

Los de Pellicer no han arrancado el 2025 de la mejor manera. Un Málaga de remontadas… en contra.

No está en buena dinámica el Málaga CF. Dos derrotas consecutivas han borrado de un plumazo el sueño de poder alcanzar las posiciones de promoción de ascenso. O al menos así lo revela el entrenador malaguista. Con 24 jornadas disputadas y en una categoría tan loca como esta, resulta osado cerrar una puerta de forma contundente porque nadie sabe lo que puede ocurrir a medio o largo plazo. Más allá de eso, es resaltable que el cuadro boquerón está donde deseó estar en agosto. Una cosa no quita la otra. Siete puntos por encima del descenso es una renta que en el mercado veraniego todos hubiésemos firmado con sangre. Pero en LaLiga Hypermotion, «camarón que se duerme se lo lleva la corriente» y en el riachuelo ahora los dos peces gordos que se ponen por delante son Racing de Santander y UD Levante.

Lo cierto es que el primer cuarto de siglo malaguista no ha empezado de la mejor manera. Tres partidos que se traducen en tan solo un punto obtenido tras el empate ante el Deportivo de la Coruña (1-1) y las derrotas contra CD Mirandés (3-2) y Real Zaragoza (1-2). Pero a veces, en el fútbol, hay que hacer más análisis. Ir más allá. No quedarse en el resultado e indagar en el ‘cómo’ del mismo.

Este equipo ha sido caracterizado a lo largo de la temporada por ser un equipo aguerrido, muy intenso y compacto. O lo que es lo mismo, un hueso muy duro de roer al que es muy difícil meterle mano. Pero en los últimos partidos no es ese Málaga. De ser el equipo menos goleado de LaLiga Hypermotion y encadenar más de un mes sin encajar un gol a recibir seis en tres fechas. Y además, en dos de los tres partidos, encajando goles en situación de ventaja en el marcador.

Son dos remontadas las que ha sufrido el cuadro de Sergio Pellicer. Ante el Deportivo de la Coruña, los malacitanos rescataron un punto in extremis con el gol de Chupete, pero en Anduva y contra el equipo de Miguel Ángel Ramírez se adelantaron en el marcador y dejaron escapar puntos. Ante el CD Mirandés pasó un huracán en los primeros 15 minutos de la segunda parte. Un vendaval de ocasiones se tradujo en dos goles en cuatro minutos que encumbraron el inicial tanto de Manu Molina. Los hicieron Panichelli, de penalti, y Gorrotxategi. Es cierto que los boquerones llegaron a empatarlo de nuevo de la mano de David Larrubia pero Joel Roca amarró los puntos en Miranda del Ebro.

Ante el Real Zaragoza, a mí modo de entender, es peor. No es el estadio del tercer clasificado ni es un equipo en buena dinámica. No te pueden remontar un partido así en casa y que llega en una situación de guerra civil interna total. O al menos si no quieres sufrir. Dioni abrió la lata nada más arrancar la segunda parte. Quizás, hiciera lo que hiciera el técnico iba a ser criticado si no conseguía los tres puntos. Si se echaba atrás, se le diría que es un «amarrategui«; si no, un suicida. Pues la única verdad es que siguió atacando. Mal, pero atacando.

El golazo de falta de Tasende puso las tablas y el Málaga CF no supo reaccionar en ningún momento. Los cambios de Ramírez dieron al equipo justo lo que buscaba. Aketxe, recién ingresado al verde, filtró un balón a la espalda de Puga para que el propio Tasende sirviera en bandeja el segundo gol a Pau Sans, también recién entrado al campo.

A día de hoy, lejos quedan esas versiones que hemos visto de este equipo de darle la vuelta a resultados de forma heroica como ante el Albacete en La Rosaleda (2-1) o el punto rescatado en el Nuevo Mirandilla ante el Cádiz CF (2-2) tras ir perdiendo 2-0. Ni mencionar lo ocurrido en el Nou Estadi y ese «amaño» tan realista y conseguido. Suena a cliché, pero es así. El fútbol es cuestión de rachas, momentos y estados de forma. Y los boquerones tienen que encontrar, cuanto antes, la válvula de oxígeno para ni siquiera sacar la calculadora con la 19º plaza de la clasificación. Y han demostrado de lo que son capaces, por lo que la confianza e ilusión es total. Ahora, dos morlacos por delante como el Racing de Santander y UD Levante. Qué mejores entidades para dar un golpe encima de la mesa.