Musa es un jugador que marca mucho el estado de ánimo del Real Madrid. Si el bosnio está a un gran nivel, el conjunto blanco suele sacar adelante sus partidos. Este año le ha tocado dar un paso al frente. La marcha de Rudy y del Chacho, le hacen formar parte del quinteto de la muerte de Chus Mateo. Una temporada en la que ha pasado del ‘31‘ al ‘13‘, a pesar de las confusiones en el Palau Blaugrana, y donde sabe que debe dar mucho más al equipo para acercarle al objetivo. El de competir por todos los títulos con la camiseta blanca. Este curso estuvo marcado por una lesión en el tobillo derecho. Volvió el 21 de noviembre, pero su nivel no aparece. Así es la crisis de Musa en el Real Madrid antes de recibir al Unicaja el domingo.
El bosnio volvía a las pistas el pasado 21 de noviembre ante el Alba Berlín en Euroliga. Dejaba atrás una lesión que le afectaba en el ligamento deltoideo del tobillo izquierdo que le dejó sin competir durante siete partidos. Era un regreso muy esperado para Chus Mateo. Musa cayó lesionado cuando era el máximo anotador del Madrid en la competición continental y el que mejor porcentaje de tres puntos estaba teniendo.
Ante el equipo alemán sí anotó 13 puntos en el día de su regreso. Pero fue un oasis en mitad del desierto. A partir de ahí, Musa no está con las sensaciones que debe. Muy precipitado. Ansioso. Tomando decisiones erróneas en situaciones que suele interpretar con facilidad. Mal en ataque. Peor en el triple y sin contundencia atrás. De hecho, Chus Mateo es consciente de cómo está y el bosnio no forzó parte del último cuarto en el igualado encuentro ante el ASVEL que el equipo blanco acababa perdiendo en tierras francesas.
De hecho, Musa jugó 14:19 minutos ante el equipo francés. Todo lo que tiraba, lo erraba. No anotó ningún tiro de campo. En la pista del Barcelona, en El Clásico que se llevó el Madrid de forma épica tras forzar dos prórrogas, no anotó ni un solo punto en el último cuarto y en las dos prórrogas. Un jugador que debe ser decisivo en esos tramos. En Liga Endesa, la situación es parecida. Ante el Joventut de Badalona entró en bucle. Fallaba acciones incluso solo en las cercanías del aro. Algo inentendible.
Es consciente de su mal momento. Musa, como se ha podido comprobar en los últimos días, se ha quitado sus redes sociales. Está atravesando una situación delicada. Y en los últimos dos partidos está en porcentajes muy negativos e inimaginables en jugador con tanto talento. Está en uno de cinco desde el perímetro. Sólo un 20% de acierto. Un jugador que junto a Campazzo, Hezonja, Deck y Tavares, forma parte del núcleo duro del Real Madrid para sacar adelante sus partidos.
En la noche de este jueves, Musa tiene la oportunidad de rehacerse ante el Fenerbahce en una nueva jornada de Euroliga. Duelo ante los de Jasikevicius que llegan a la cita en la segunda posición de la clasificación de la Euroliga. El equipo blanco afronta este partido fuera de las posiciones de play-in. Después de enfrentarse al equipo turco, será turno para recibir al Unicaja en el Wizink Center. Un auténtico partidazo.