El Unicaja sigue haciendo historia con el título de la Intercontinental de la FIBA. Los malagueños suman a su palmarés el tercer trofeo en apenas dos temporadas. Con su victoria en Singapur, (75-60), el equipo del Martín Carpena se proclamó campeón del mundo de la FIBA tras su triunfo contra el combinado norteamericano de la G-League. Un partido que los de Ibon Navarro dominaron con claridad y donde Dylan Osetkowski volvió a dar un recital de galones con sus 15 puntos y 4 rebotes. Séptimo título en la historia del club malacitano.
El comienzo del Unicaja fue propio de un equipo ganador. Los malagueños comenzaron fuerte en el juego interior con Yankuba Sima y Dylan Osetkowski perforando la cesta rival con facilidad. La defensa cajista era potente y el parcial de 3-11 de inicio era un aviso de la seriedad con la que el Unicaja se iba a tomar el partido. Sin embargo, el combinado de la filial de la NBA iba a salir rebelde. Rob Baker II, Brodic Thomas y Juan Toscano consiguieron un parcial de seis a cero para los norteamericanos que igualaron las cosas en el tramo final del primer acto. Ibon Navarro rotaba para dar aire a los suyos. El equipo de la G-League apretaba y el marcador estaba de lado a lado. El Unicaja tiró de físico y de lanzamientos libres para acabar por delante. Un triple de Kalinoski cerró el cuarto (22-17).
Charlie Brown arrancó el segundo cuarto con un triple para los estadounidenses. Un avisó que apretaba de nuevo el marcador. El Unicaja reaccionó con facilidad con Osetkowski, Kravish y Perry. El partido entró en un tramo de muchos fallos y muchas prisas. El equipo G-League buscaba con ansiedad el triple sin acierto y el Unicaja perdió por momentos su frescura en la movilidad de la bola. Osetkowski es y será siempre un seguro de vida. Su triple puso once arriba a los malagueños y elevó al californiano por encima de los 10 puntos. Era el mejor del partido e Ibon Navarro le dio los galones del ataque ante el atasco cajista. Sin embargo, los americanos no se rendían. Su mano desde el triple se notaba y un rápido parcial de 0-6 ajustaba al marcador de nuevo. El Unicaja se iba con ventaja al descanso, (38-32).
El descanso sentó bien al Unicaja que arrancó como una moto el segundo tiempo. El parcial de arranque de 12-2 para los cajistas fue devastador. Sima y Osetkowski mataban en la pintura mientras que Kalinoski estaba fino desde la línea de 6,75. El resultado fue un Unicaja lanzado en el marcador. Los malagueños imponían su criterio poco a poco. La renta de diez puntos no se movía. MJ Walker y Jordan Bowden mantenían en pie a los futuros talentos de la NBA. No terminó de rematar la faena el Unicaja en el tercer cuarto y el sabor fue un poco agridulce a la hora de entrar a los últimos diez minutos de partido, (57-44).
El Unicaja volvía a meter una marcha más al inicio del último cuarto. Perry y Kameron Taylor se echaron el ataque cajista a la espalda con un parcial de ocho a cero que dejó el partido prácticamente visto para sentencia. Los norteamericanos se obcecaron con los triples y el final del encuentro fue un paseo cómodo para los del Martín Carpena. Osetkowski fue el mejor de los cajistas y el partido quedó rematado con un 75-60 que reflejó con claridad la superioridad española en Singapur.
Olé!!
Grandes!!