El 52% de los participantes de Metapueblos de la Diputación han decidido quedarse a vivir en el medio rural. Se tratan de 11 personas, algunas acompañadas de sus familias del total de las 21 (menores de 45 años) que han participado en este proyecto piloto de itinerarios de formación incentivada. Así, algunos municipios de la Axarquía y Serranía de Ronda han ganado 18 nuevos pobladores. Otros, no han cambiado de lugar de residencia, pero gracias a este programa, han encontrado empleo.
Así lo ha informado la vicepresidenta de Ciudadanía y Equilibrio Territorial, Antonia Ledesma, que ha participado en la jornada de clausura y evaluación de la primera edición de ‘Metapueblos, más allá de la ciudad’.
El programa se ha desarrollado desde septiembre de 2023 en torno a cuatro ejes de economías emergentes en los pueblos: agroecología, bioconstrucción, economía senior y energías renovables, mediante formación, inmersión rural y prácticas en empresas. Han sido en total 10 empresas y 8 ayuntamientos de la Serranía de Ronda y Axarquía (comarcas más amenazadas por la despoblación), los que se han implicado en la primera edición de este proyecto para atraer a nuevos pobladores que encontrarían nuevas oportunidades laborales.
La jornada de networking de hoy ha reunido a participantes del proyecto, dinamizados por la coach Virginia Perea, a mentores y profesorado de apoyo durante el periodo formativo que les ha preparado para la inmersión y adaptación al mundo rural, además de a representantes de empresas y ayuntamientos que han participado en esta primera edición.
Cuatro familias, más siete personas, los nuevos pobladores
Gracias a ‘Metapueblos’, el territorio donde se ha desarrollado ha ganado en total a cuatro familias; dos de ellas permanecerán en la Serranía de Ronda, concretamente, en Benarrabá y en Cortes de la Frontera y otras dos en la Axarquía, en Canillas de Aceituno y El Borge. Lo que hace un total de 11 personas, incluyendo a 3 menores.
Las restantes 7 personas se quedarán en los municipios de la Axarquía de Alcaucín, Almáchar, Canillas de Aceituno y Salares y otros 2 de los participantes se le ha gestionado la inserción laboral en Antequera y Torrox en empresas vinculada a las energías renovables.
En cuanto al eje formativo de economía sénior, Ledesma recalca que es en el que contó con más alumnado, el 38% del total, y el que concentró más féminas ya que 5 de las 8 personas que lo integraron son mujeres.
Destaca, también, que el sector de economía sénior es el que reúne a más emprendedores rurales y el más dinámico porque el hecho de invitar a las personas a participar ha supuesto un valor añadido a la experiencia y un factor de dinamización mostrando una visión más precisa y cercana al territorio ya que son los propios habitantes los que expresan lo que necesitan para mejorar sus vidas.
Tras la experiencia van a continuar en el medio rural 5 participantes y ha anunciado que fruto del trabajo desarrollado, está en trámite de constitución una asociación formada por tres personas de este perfil, que desarrollarán su actividad en las dos comarcas, continuando con labores de dinamización y aprovechando las sinergias y redes iniciadas en el proyecto.
Además, es el eje que ha logrado la participación más activa de la población de más de 60 años, que representa en todos los municipios estudiados valores cercanos al 40, a través de la creación de grupos focales para que la ciudadanía aportase su visión de lo que necesitan para mejorar sus condiciones de vida y hacer de sus pueblos lugares más amigables y atractivos para la población en general.
La vicepresidenta ha informado que con respecto al eje de energías renovables, es el que más capacidad presenta para generar empleo, ya que 2 de los 3 participantes han conseguido trabajo en el sector. Uno de ellos en Antequera y otra en Vélez-Málaga, que aunque se salgan del ámbito de actuación del programa, les ha servido para encontrar empleo.
Con respecto a este eje, la vicepresidenta indica que aunque es el que más capacidad presenta para generar empleo, “es fundamental la formación específica que configuren perfiles laborales adaptados a los requisitos de las ofertas, por lo que creemos que es acertado apostar por la cualificación profesional del sector”.
Con respecto a las 5 personas que han desarrollado su itinerario en bioconstrucción, 2 han encontrado trabajo en otros sectores y se quedan a vivir en El Borge, Cortes de la Frontera y Benarrabá. Un tercero ha decidido emprender desde El Borge en agroecología.
Sobre el itinerario en Bioconstrucción, “el alumnado muestra una alta satisfacción con la experiencia adquirida, pero no se ha producido la inserción en las empresas donde realizaron las prácticas porque no tienen capacidad suficiente para generar puestos de trabajo a medio y largo plazo”, ha precisado Ledesma.
La estacionalidad del empleo y el hecho de que se trate de autónomos ha condicionado que se produzcan contrataciones.
“Seguiremos fomentando la cultura emprendedora y apostando por el apoyo institucional de campañas de bonificación a las contrataciones, que permitan abaratar costes al empresariado”, ha remarcado Ledesma.
En cuanto al eje de agroecología, de los 5 participantes, una persona se queda en la empresa donde ha realizado las prácticas, por lo que residirá en Almáchar.
Según la vicepresidenta, “a pesar de ser el sector primario la principal actividad económica de los pueblos, se caracterizada por su escasa diversificación y la estacionalidad de los cultivos, lo que influye negativamente en el mercado laboral, por lo que tenemos que trabajar en la formación en digitalización para mejorar la competitividad del sector y en acciones que conduzcan al relevo generacional con miras a su modernización”.