El Pabellón Fernando Argüelles de Antequera se prepara para una de sus tardes gloriosas este sábado 20 de abril. A las 18:30 horas, el Balonmano Dólmenes Antequera recibe al Balonmano Burgos, el segundo clasificado de la competición de Plata. Sin duda, una cita muy difícil para los verdes, pero que a buen seguro afrontarán con ilusión y competitividad, ya que por ganar pasa el seguir con opciones de clasificación de playoffs de ascenso.
El conjunto antequerano está situado en la octava plaza con 28 puntos, a uno de Cisne (séptimo) y a dos de Villa de Aranda (sexto). Éste último cierra el acceso a los playoffs de ascenso. Todo está por decidir con tan solo una victoria de diferencia. Cabe decir que el Dólmenes tiene ganado el golaverage con Aranda, algo que podría resultar clave en un hipotético empate. En el caso de Cisne, aún está por jugarse el partido de vuelta en el Argüelles.
Los pupilos de Juan Antonio Vázquez ‘Chispi’ llegan en muy buen momento de forma a este tramo decisivo de la competición. Tras arrasar ante Oviedo en casa y ganar la semana pasada en la pista de Novás, los antequeranos quieren ahora dar la sorpresa ante Burgos. Ya lo hicieron en el partido de ida, donde consiguieron empatar en la pista de su rival a pesar de las numerosas bajas con las que contaban, yendo solo once jugadores de la primera plantilla.
En la previa del choque, el jugador del Dólmenes Antequera Martín Molina aseguró que tras conseguir el primer objetivo de la permanencia, ya matemáticamente, ahora es el momento de mirar arriba y ser ambiciosos. El objetivo ahora es darlo todo y agotar hasta la última posibilidad de clasificarse para los playoffs de ascenso.
