Ramón regresa ‘renacido’ y con un brutal cambio físico

Se acabó la espera. Ramón Enríquez vuelve a los campos de entrenamiento casi 11 meses después de su lesión. Lo hace siendo un hombre nuevo y un jugador nuevo. Una transformación mental y física que le ha llevado a estar al borde del abismo para conocerse un poco mejor. El canterano malaguista volverá a ser uno más en la dinámica del grupo y Sergio Pellicer contará con un fichaje más que deseado. Este martes empieza una nueva vida para el de Órgiva con el centrocampista incorporándose de manera total al trabajo de la plantilla.

Hay que remontarse al 23 de abril de 2023 El Málaga CF asaltaba el Anxo Carro (0-2) en la jornada 37 para soñar con una permanencia que se situaba a dos puntos en ese momento. La ilusión desbordada de los aficionados malacitanos solo se vio enturbiada por una lesión. Ramón tuvo que dejar el partido en el minuto 43. El jugador notó un pinchazo en el cuádriceps e hizo saltar todas las alarmas. Se confirmaron los peores presagios con el desgarro del jugador, un dolor tan insoportable que incluso le provocó un mareo en el verde lucense. 

El ‘6’, consciente de la gravedad del asunto, se marchó del estadio entre lágrimas. Ramón Enríquez se alzó como referente en un equipo a la deriva y los mejores partidos del Málaga de Pellicer, a la par que los únicos momentos de esperanza, fueron fielmente ligados a las participaciones del mediocentro. De esta manera, Ramón dijo adiós al resto de la temporada 2022/2023 en la que quién sabe si su presencia hubiera evitado el descenso de categoría. 

Una vez que se engrasó y arrancó la maquinaria de cara a la temporada 2023/2024 en Martiricos, no se dudó ni un segundo de la confianza en Ramón. El proceso de recuperación del jugador seguía la evolución marcada y se esperaba que pudiese volver a jugar antes de la segunda vuelta. Incluso llegó a entrar en convocatoria en el partido de Copa del Rey ante el Eldense el 6 de diciembre. Pero un nuevo contratiempo golpeó al mediocentro. Una semana más tarde conocíamos que el futbolista sufría una recaída. Esta vez, una diferente a la lesión de Lugo. Una lesión en el recto anterior del cuádriceps de su pierna derecha, lo que aplazó el regreso del mismo. 

El proceso mental, además del físico, que ha vivido el futbolista en este año fuera del verde ha sido complicadísimo. Ramón ha cambiado por completo desde la alimentación hasta su manera de afrontar las críticas externas. En el club no han metido prisa con su vuelta podría llevar un mes vestido de corto, pero se decidió adoptar todas las medidas cautelares suficientes para que el regreso sea seguro en su totalidad. 

El cambio físico es notable. El de Órgiva ha perdido un total de cuatro kilos y ha ganado mucha masa muscular para estar a punto. No solo ha trabajado con el equipo médico que le proporciona el club, sino que además ha incorporado readaptadores y otro equipo médico aparte para realizar la recuperación de manera individualizada. Algo que ha costeado de su bolsillo. Cabe destacar que no ha disfrutado de vacaciones ni en verano ni en invierno, ya que se ha quedado priorizando su vuelta al verde y trabajando. 

Lo que todo el malaguismo espera es que todo este esfuerzo no sea en vano y que pueda volver a los planes del técnico de Nules más pronto que tarde. Hoy, 19 de marzo de 2024, la vuelta de Ramón Enríquez es una realidad. Es más, el propio Sergio Pellicer afirmó hace unas semanas que es la vez que mejor ha visto al jugador volver de una lesión. Sin duda alguna es un aliciente más para generar una ola de optimismo e ilusión en él. Si muestra un nivel cercano al ofrecido en Segunda, se convertirá en un centrocampista referente de la categoría. Diez partidos y unos play-off es lo que le queda por delante. Las expectativas con su vuelta están por las nubes.