No puede estar contento el malaguismo con el empate conseguido por su equipo en el campo de El Palmar. La imagen de los jugadores dirigidos por Sergio Pellicer no fue buena y en ningún momento dieron la sensación de ser superiores a unos rivales que conforman un conjunto muy incómodo, pero, no es menos cierto, que sobre el papel inferior… aunque ya se sabe que esto hay que demostrarlo en el campo, y esta vez los malaguistas no lo hicieron. Una jornada más, y van muchas esta temporada, el Málaga no ha estado a la altura de lo que se le presupone como candidato al ascenso, sabedor además de lo importante que era la victoria en esta ocasión tras conocer los resultados de algunos de sus más directos rivales.
La victoria del Córdoba (ya es tercero en solitario) y el empate del titubeante Ibiza que sigue segundo a cuatro puntos de distancia, eran suficientes estímulos para haber salido al césped con el total convencimiento de luchar por los tres puntos. La segunda plaza de la clasificación, objetivo que a priori se presenta como más cercano, se convierte en una tarea mucho más complicada con este empate porque el Córdoba no está dispuesto a ceder ni un palmo de terreno, y los malaguistas no han aprovechado otro traspiés del Ibiza. No olvidemos, por cierto, que el Málaga tendrá que visitar el campo de El Arcángel donde deseamos que sea capaz de dar un golpe de autoridad. Ojalá sea su primer triunfo a domicilio ante uno de sus rivales más directos porque, hasta ahora, solo ha sido capaz de empatar fuera ante el Ibiza (2º) y el Recre (5º), además de sufrir la derrota inaugural en el estadio de Castalia, feudo del líder Castellón.
El malaguismo necesita una victoria de las de prestigio como podría ser si se lograse en Córdoba, pero para eso quedan todavía unas semanas y la obligación es ganar cada partido, como el del próximo domingo ante el Intercity. Lo primero, es lo primero. En esta ocasión el plan de partido de Sergio Pellicer no dio sus frutos, y echó de menos al ausente Manu Molina, lesionado. Mientras que el portero del equipo gaditano no pasó por apuros, la portería malaguista se quedó esta vez imbatida gracias a otra magistral intervención de Alfonso Herrero, y a que el palo izquierdo de su marco escupió un disparo que ya se cantaba como gol. El Málaga en ataque ofreció un pobre balance y es que, en esta ocasión, la falta de Roberto como referencia sí se sintió. Por cierto, una vez más, Javier Avilés demuestra que no es un delantero como el que necesita el equipo cuando no están Roberto y Dioni.
Otra cuestión es la que no se puede dejar pasar por alto con el penalti que Avilés sufrió tras recibir un auténtico patadón de un defensa contrario, lo que podría haberle dado la victoria al Málaga, pero aún así ni el equipo hizo méritos suficientes para pasar de un Empate Insulso, ni Avilés, por más que quieren convencernos, es un killer de área. Lástima de oportunidad perdida para haber sumado una victoria pero, como el que no se consuela es porque no quiere, nos quedaremos con aspectos positivos como que una jornada más la portería de Alfonso Herrero se quedó imbatida, y es el portero menos goleado del grupo con 19 tantos, solo superado por el Nástic de Tarragona y la Ponferradina, equipos del grupo 1, con 17 tantos encajados; otro punto positivo, es que se tiene que producir un cataclismo para que el Málaga no esté en las eliminatorias por el ascenso al tener una distancia de 12 puntos con el sexto clasificado a falta de 11 jornadas para la conclusión de la liga regular; y que, entre otras cosas, otra vez la afición estuvo soberbia dando colorido blanquiazul a las gradas de El Palmar.
PD: Hay que subir para, entre otras cosas, dejar de sufrir las retransmisiones y los cortes de emisión de FEFTV, menos mal que nos quedan las narraciones de Radio Marca Málaga.
José Manuel Velasco
Redactor Onda Cero Málaga