Rubén Yáñez es sin duda de los exmalaguistas del descenso el más querido por la afición blanquiazul. El portero madrileño fue de los mejores la pasada campaña. Sus paradas evitaron que el descenso a Primera RFEF se consumara mucho antes. Ahora, juega en el Sporting, que ronda los puestos de ascenso a Primera en esta campaña 2023-2024. Durante el choque contra el Zaragoza, el portero se marchó lesionado con lágrimas en los ojos. Durante muchas horas se ha temido por una lesión de ligamento cruzado, de lo peor que puede pasarle a un jugador en el mundo del fútbol. Por suerte, Rubén Yáñez evita una lesión grave y solo estará de baja unas semanas. Así lo ha podido confirmar Radio MARCA Málaga.
Miguel Ángel Ramírez, entrenador del conjunto asturiano, relató en la sala de prensa de La Romareda que Yáñez estaba pendiente de las pruebas médicas para saber el alcance de su lesión. El portero es clave en el Sporting de Gijón y la afición rojiblanca se acostó muy preocupada. El meta se ha sentido muy aliviado de que todo haya quedado en un susto. “El campo estaba demasiado blando, hizo un gesto al pisar y sentía algo en la rodilla”. Así lo explicó el entrenador sobre la lesión de su portero titular.
Yáñez se marchó del Málaga después del descenso. Lo hizo prácticamente obligado puesto que la cantidad que puso encima de la mesa el equipo de El Molinón era inalcanzable para los de La Rosaleda. A pesar de ello, el portero se sentó con Loren Juarros por si había alguna posibilidad. No estaba obligado, ya que su cláusula de libertad por descenso le permitía marcharse de Martiricos por cero euros. Yáñez necesitó poco tiempo para arrebatar la portería al favorito de Manolo Gaspar, un Manolo Reina que fue una de las mayores decepciones de la temporada pasada. Por suerte, Yáñez evita una lesión grave y solo estará de baja unas semanas.
Le deseo mucha suerte en su recuperación.
Por suerte Alfonso se ha encargado de que no le echemos de menos.