Final amargo para el Costa del Sol Málaga, que murió en la orilla después de remar 60 minutos. Cruel desenlace para las panteras, que perdieron la final de la Supercopa Ibérica Femenina en penaltis. 3-2 para el Super Amara Bera Bera, tras el 28-28 en el tiempo reglamentario, que las coronó como campeonas. Enorme puesta en escena de las malagueñas, a las que se les escapó la guinda en la suerte de los siete metros. Alice Fernandes se erigió en protagonista y dejó el primer título de la temporada en el José Antonio Gasca.
Había extrema igualdad en el inicio, con mucho respeto en ambos lados. Emergía la figura de Roca Campigli, que en el pivote hacía mucho daño para ofrecer las primeras ventajas (4-5). Algún balón extraviado no permitía estirar más, la defensa subía varios peldaños en intensidad y se reflejaba en el corazón verde del Gasca. Arrojería daba el mando a las de Imanol Álvarez en el ecuador del primer tiempo (7-6) y Elke Karsten ampliaba (9-7). En un pestañeo se recuperaban las malagueñas, en una versión muy competitiva. Eli Cesáreo invertía la cuesta y el primer tiempo local era una realidad con el 12-14. Tocó la tecla y las vascas se marchaban por encima al descanso (15-14).
Volvía a tener una notable salida el Costa del Sol Málaga, férreo atrás y encontrando pasillos en el área rival. Isa Medeiros y Sole López estiraban desde el extremo (18-20). Tenía momentos el equipo de Suso Gallardo, aunque no pegaba el zarpazo definitivo. Siempre había un palo en las ruedas. Esta vez era una exclusión de la brasileña y otra de Elena Cuadrado, posteriormente expulsada, las que cortaban la dinámica. Las donostiarras aguantaban la marea e incluso Marie Louis volteaba (25-24).
No le perdían la cara las panteras, a lomos de Estela Doiro. La gallega ponía el 25-26, que era contestado por Emma Boada. Emergía entonces la figura de Silvia Arderius, siempre lista en los instantes donde el balón quema. Dos goles de la madrileña dejaban un 26-28 con tres minutos por delante. Maitane Echeverría contestaba fugazmente y ahora otra exclusión, con Espe López como perjudicada, castigaba de manera severa. En los siete metros lo empataba Elke Karsten (28-28). No entraba el último lanzamiento de Patri Lima y tocaba romper la igualdad en los penaltis.
Una fortuna donde se desenvolvió mejor el Super Amara Bera Bera. Mariane Fernandes lo metía y Arderius contestaba. Hacía lo propio Boada y con el palo se topaba Gabriela Bitolo. Karsten se encontraba con Virginia Fernández y Bárbara Piñeira tiraba de sangre fría para anotar su lanzamiento. Marie Louis no fallaba y Patri Lima no podía batir a Alice Fernandes, que también detenía el decisivo a Isa Medeiros después de otra parada de Virginia a Laura Hernández. 3-2 para las locales, que levantaron el título en casa. Orgullo y honor para el Costa del Sol Málaga, gigante competidor y que se quedó muy cerca de una Supercopa Ibérica Femenina que es una realidad.
