Este próximo domingo 2 de abril se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, una fecha instaurada por Naciones Unidas con el objetivo de visibilizar a las personas con trastorno del espectro del autismo (TEA) y contribuir a promover el ejercicio efectivo de sus derechos.
El TEA es un trastorno relacionado directamente con el desarrollo del cerebro, la cual afecta a la manera en la que una persona percibe y socializa con otras, lo que causa problemas en la interacción social y la comunicación, así como patrones de conducta restringidos y en la mayoría de las ocasiones repetitivos.
Se trata, en definitiva, de un amplio abanico de síntomas que comprende afecciones que anteriormente se consideraban independientes, como el autismo, el síndrome de Asperger, el trastorno desintegrativo infantil y una forma no especificada de trastorno generalizado del desarrollo.
Por otro lado, TEA e infancia son dos conceptos que van de la mano, ya que esta enfermedad se inicia en los primeros años de vida y, de no ser abordada por profesionales lo antes posible y de la manera más adecuada, provoca problemas en el niño a la hora de desenvolverse en su día a día (escuela, familia, etc), los cuales irán acompañándole a lo largo de su vida.
En este sentido, la Dra. Marina Romero, psiquiatra infantil y coordinadora de la Unidad de Salud Mental Infantil, Neurodesarrollo y Atención Temprana (USMIN-AT) de Vithas Málaga insiste en «la importancia de un diagnóstico, detección y atención temprana del autismo como principal herramienta para favorecer el desarrollo y la calidad de vida de los niños y niñas con TEA, al mismo tiempo que favorece el bienestar emocional de las familias».
Atención temprana y multidisciplinar: elemento clave para conseguir el correcto desarrollo y calidad de vida del niño/a.
Un diagnóstico precoz forma parte del recorrido necesario para obtener cuanto antes el acceso a una atención temprana específica y especializada.
El acceso a una atención temprana de calidad resulta esencial para favorecer el desarrollo y la calidad de vida del niño con TEA, sin olvidar que esto afectará también favorablemente en el bienestar emocional de sus familias. Dicho de otro modo, que pacientes y su entorno tengan acceso inmediato a un conjunto de intervenciones coordinadas y multidisciplinares para dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades que presenten en las primeras etapas de su desarrollo.
La palabra “multidisciplinar” juega un papel clave en este proceso, así lo explica la Dra. Romero especialista en psiquiatría infantil y de la adolescencia por el prestigioso hospital Maudsley Hospital-King´s College de Londres. «A la hora de abordar un posible caso de TEA en un niño, es necesario que intervenga siempre un equipo multidisciplinar de profesionales con formación específica en esta patología, y que lleve a cabo diversos exámenes médicos, psicológicos, valoraciones genéticas y exploraciones otorrinolaringológicas que ayuden al precisar lo máximo posible el diagnóstico. Hablamos, como sucede en la USMIN-AT de Vithas Málaga, de psiquiatras y psicólogos infantiles, logopedas, psicopedagogos, terapeutas ocupacionales o fisioterapeutas».
Pero antes incluso de este diagnóstico precoz, el papel del entorno del niño/a (padres, familiares, profesores, etc.) es clave a la hora de detectar determinados signos de alarma que nos animen a acudir a un centro especializado y llevar a cabo esa valoración diagnóstica exhaustiva mencionada anteriormente, con el objetivo de descartar o confirmar el diagnóstico de TEA.
10 banderas rojas para la detección temprana del TEA
Las banderas rojas o signos de alarma son alteraciones en el aspecto físico, comportamiento o signos vitales del niño que pueden ser observadas fácilmente por familiares y entorno del niño. En el caso del TEA debemos prestar atención a las siguientes:
- Falta de atención conjunta (primeros meses).
- Ausencia de balbuceo a los 5 meses.
- Ausencia de compartir recíprocamente sonrisas, expresiones faciales a los 9 meses.
- Ausencia de gestos como señalar, mostrar, alcanzar o saludar, a los 12-18 meses.
- Ausencia de alegría u otras expresiones de placer.
- Ausencia de palabras a los 16 meses.
- Ausencia de frases de 2 palabras significativas (no imitativas) a los 24 meses.
- Cualquier pérdida de lenguaje, balbuceo, habilidades sociales a cualquier edad.
- Movimientos repetitivos con objetos.
- Posturas extrañas del cuerpo, brazo, manos o dedos.
El próximo 12 de abril, una sesión gratuita sobre el abordaje integral del TEA
Con el objetivo de concienciar sobre la importancia de un diagnóstico precoz del TEA, así como dar a conocer las diferentes terapias que existen en las diferentes etapas de la vida de los niños con TEA, la Unidad de Salud Mental Infantil, Neurodesarrollo y Atención Temprana del Hospital Vithas Málaga organiza el próximo miércoles 12 de abril a las 19:00h una charla gratuita enmarcada dentro del programa “Aulas Salud”. Éste forma parte de la iniciativa de Vithas de formar e informar a la sociedad sobre aspectos relacionados con el cuidado de la salud como parte de su compromiso con la sostenibilidad empresarial
Dirigida tanto a padres, madres y familiares de niños con TEA, o que presenten algún signo de alarma como los descritos anteriormente, esta iniciativa pretende ofrecer herramientas y tipos de terapias para el abordaje integral del TEA, así como concienciación sobre la importancia de su diagnóstico precoz. Será impartida por la propia Dra. Marina Romero González, así como por Cristina Martínez, terapeuta ocupacional y logopeda de la USMIN-AT, y experta en TEA.
Las inscripciones, limitadas hasta completar aforo, podrán realizarse hasta el martes 11 de abril en el email comunicacion.malaga@vithas.es.