La baja de Lima, más la imposibilidad hasta ahora de encontrarle un buen sustituto en el mercado, obliga al Unicaja a paliar la ausencia del brasileño con lo que hay en casa. La rotación interior queda mermada, pero Ibon Navarro cuenta con herramientas para ir tirando; a la espera de ese regalo de Reyes que debería llegar próximamente. El ejemplo de lo que se pretende es la versión que dieron los malagueños en la segunda parte ante UCAM Murcia, ya con el brasileño dolorido, incluso el vestuario era consciente que algo gordo se avecinaba. Se tuvo ese corazón y energía pese a no contar con uno de los jugadores que más se asocia a esos términos. Will Thomas asumió liderazgo en los verdes frente a los de Sito Alonso, su mejor partido desde su regreso, no solo en lo numérico.
También porque exudaba esa confianza que aún no se le había visto en esos meses. Y sigue siendo diferencial. En el club tenían muy claro que más pronto que tarde iba a aparecer el Will Thomas que todos conocemos, pese a que no es el físico de antaño. La calidad sigue latente. El de Baltimore debería coger algo más de peso en las próximas semanas, también porque se lo ha ganado en pista. A principio de temporada no lucía, hasta el punto de lastrar a los verdes por no estar a tono. Se tuvo paciencia viendo los precedentes. El ala-pívot necesitaba un periodo para alcanzar su pico, se hablaba de diciembre como el momento Will Thomas. Además, en la entidad están encantados por ser una figura paternal en el vestuario, la voz de la experiencia y su papel a la hora de hacer piña. Es un tipo especial.
Pero es un pensamiento cortoplacista porque debe llegar un pívot sí o sí a Los Guindos. Los tiempos difíciles para encontrar un pívot, a lo que hay que sumar los buenos resultados hasta la fecha, no genera urgencias al Unicaja a la hora de encontrar esa pieza y completar el puzle. Son semanas algo más tranquilas en cuanto a carga de partidos hasta que vuelva la BCL y poco después la Copa. Hay margen para moverse, aunque también se cuentan con jugadores versátiles que en un momento dado, como es el caso, te pueden resolver el problema momentáneamente. A este grupo hay que sumar a Osetkowski, a quien le tocará jugar más de «5» que de costumbre; una posición en la que se ha amoldado bien a esta Unicaja.
Will Thomas viene de hacer 14 puntos y 6 rebotes ante los universitarios en 20 minutos; no debería pasar de ese tiempo porque perdería prestaciones, pese a que se le vea más fresco que en septiembre. Este miércoles, ante un rival peligroso como Bilbao Basket en el Carpena; ojalá Thomas pueda mantener la línea del pasado miércoles.
