− “Hoy reconocemos y homenajeamos su entrega y dedicación a los demás,
completando el reconocimiento que ya le otorgamos de forma unánime en el pleno
de esta Corporación”, ha recordado el alcalde de Benalmádena, Víctor Navas
− Alejandro Ortiz instruyó en técnicas de reanimación y primeros auxilios a cientos
de escolares, formaba a policías y voluntarios de Protección Civil, y era parte activa
de varios clubes, asociaciones, movimientos vecinales y políticos, contribuyendo
siempre desde su saber a llevar la seguridad sanitaria a todos los colectivos
El alcalde de Benalmádena, Víctor Navas, junto a una nutrida representación de
concejales de la Corporación, y al delegado de Salud de la Junta en Málaga, Carlos
Bautista, han descubierto esta mañana en el centro de salud de Torrequebrada una placa
conmemorativa en memoria y reconocimiento a Alejandro Ortiz Cabrera.
Durante el pleno ordinario de noviembre de 2021, la Corporación aprobó por unanimidad
el Expediente de Honores y Distinciones para la Nominación Egregia a Alejandro Ortiz
Cabrera a título póstumo.
“El pasado 8 de noviembre de 2020 los benalmadenses recibimos la noticia del
fallecimiento de Alejandro Ortiz Cabrera en un trágico accidente de tráfico”, ha recordado
el alcalde de Benalmádena, Víctor Navas.
“Hoy reconocemos y homenajeamos su entrega y dedicación a los demás, completando el
reconocimiento que ya le otorgamos de forma unánime en el pleno de esta Corporación”,
ha recordado el alcalde.
Alejandro, enfermero del 061, prestaba su experiencia y altos conocimientos sanitarios
para socorrer a las personas en los momentos más difíciles, contribuyendo con su
profesionalidad y calidad humana a darles esperanza y aliviarles su dolor.
Alejandro instruyó en técnicas de reanimación y primeros auxilios a cientos de escolares,
ya que cada año colaboraba impartiendo jornadas de formación para los alumnos de los
institutos y colegios de nuestra localidad. Formaba a policías y voluntarios de Protección Civil y, en definitiva, compartía sus conocimientos con todos los colectivos humanos
donde los recursos sanitarios podían ser de utilidad.
Era parte activa de varios clubes, asociaciones, movimientos vecinales y políticos,
contribuyendo siempre desde su saber a llevar la seguridad sanitaria a todos los
colectivos: un club motero, diferentes clubes y disciplinas deportivas (rugby, aikido,
triatlón, ‘ironman’…), la Asociación de Voluntarios de Francisco Portillo, con quien
colaboraba activamente en muchas actividades para la tercera edad, AMPAs y otros
colectivos.
“Entre sus anhelos estaba el convertir a Benalmádena en una ciudad cardioprotegida,
motivo por el que impulso los primeros maratones para enseñar reanimación
cardiopulmonar a los estudiantes del municipio: hoy estaría orgulloso de que todos los
edificios municipales de la ciudad cuenten con equipos desfibriladores, un contrato que
nos hubiera gustado suscribir junto a él”, ha declarado el alcalde.