La BCL queda aparcada hasta nuevo aviso. Con el sabor de boca algo amargo por la derrota ante Sassari, pero que no empaña el buen trabajo del Unicaja en la fase de grupos: un récord muy meritorio de 5-1. Además de los verdes, solo pueden presumir de ello en esta edición el Bonn alemán y el Hapoel de Jerusalén. Se hicieron los deberes bien pronto para evitar precisamente el jugártela con los de Cerdeña en la última jornada, por suerte un tropiezo que no acarrea consecuencias, más allá de no poner la guinda con el 6-0. En Los Guindos ya ponen un ojo en ese ‘play-in’, donde saldrán dos de los tres rivales del conjunto malagueño en el ‘Round of 16’. Arrancará el próximo 3 de enero.
Con el Galatasaray confirmado, el Unicaja se cruzará con el vencedor de la eliminatoria entre el Ludwigsburg y el Limoges; los alemanes jugaron la Final Four de Bilbao en la pasada edición, cayendo con BAXI Manresa. Esta temporada son cuartos en su Liga, una competición que va creciendo con el paso de las temporadas. El Limoges, lejos de ser el equipo glorioso de los 80 y 90, verdugo del Unicaja en la Korac del 2000, mantiene el prestigio en Francia, sextos en la LNB; un par de pasos por debajo de Mónaco y Asvel.
El miembro restante de ese grupo K saldrá del duelo entre AEK de Atenas, campeón de la segunda edición de la BCL; Y el Tofas Burça, potencial para llegar a las rondas finales en esta edición. Los malagueños tendrán que confirman en este ‘Round of 16’ su candidatura a suceder al Lenovo Tenerife. No será fácil.