El Unicaja reafirmó su quinto puesto en Liga Endesa con el triunfo en La Fonteta, y que le permite dar un paso de gigante hacia la Copa del Rey de Badalona. Un subidón de adrenalina al ganar a un equipo de Euroliga, pese a que no corren buenos tiempos en el Valencia Basket. Veremos si con consecuencias en el futuro de Álex Mumbrú, muy cuestionada su figura. Todo lo contrario para su compañero en los banquillos. Ibon Navarro ha convertido al Unicaja en un equipo de autor, ya reconocible, y generando prácticamente una aceptación unánime en la afición cajista. Además, la victoria en la Fuente de San Luis supone el mejor arranque del técnico cajista.
Consumido el ecuador de la primera vuelta, el vitoriano nunca había firmado un balance de 6-3 en las siete temporadas anteriores, desde que entrenador jefe. El mejor registro hasta ahora data de la temporada 19/20 con Morabanc Andorra, consiguiendo un también notable 5-4. Los del Principado lograron ir a la Copa de esa edición, celebrada en Málaga, cayendo precisamente ante el Unicaja en semifinales. Tres temporadas después, Ibon Navarro tiene muy cerca el devolver a los verdes al torneo del KO. Aún con ocho jornadas por delante antes del corte, pero ya habiendo hecho parte de los deberes. Hay que hacerlo bueno en las próximas semanas. Seguro que llegarán los baches.
Son cinco victorias seguidas, cuatro en Liga Endesa. Desde la derrota en Badalona, todo han sido alegrías, con un parón de por medio nada fácil de gestionar. Se está teniendo ese punto de fortuna con las lesiones, otro factor a tener en cuenta del porqué el equipo malagueño mantiene la regularidad. Hasta con un destino caprichoso: Kalinoski, que era duda para jugar en La Fonteta, firma 14 puntos; parecido a Perry en Santiago con el problema en la espalda. Mucha culpa la tiene Ibon Navarro, un técnico que está superando las expectativas, del que incluso hubo voces escépticas en verano con su continuidad. Oportunista decirlo en este contexto tan bello, pero es un entrenador preparado para el siguiente nivel. Por suerte está en Málaga.
