Este año le ocurre de todo a los de la Costa del Sol. Entre bajas, mala suerte, errores garrafales y decisiones arbitrales. Una de las cosas que también ha sufrido es enfrentarse a un equipo que estrene inquilino en el banquillo. El Málaga puso a examen a tres entrenadores.
Hasta en tres ocasiones puso fueron los de Martiricos el primer rival de un nuevo entrenador. Álvaro Cervera, Fran Escribá y David Gallego. Pepe Mel ha tenido que afrontar tres partidos en los que no tenía referencias al ser el primer encuentro de esos proyectos.
El primero fue Álvaro Cervera. El ex entrenador del Cádiz cogió las riendas de un Oviedo en el que se fueron de la mano tanto Bolo como el director deportivo. Llegó Cervera y el Málaga rascó un empate, después le has costado ganar, pero lo hizo al Granada.
El siguiente compromiso donde pasó de igual forma fue la jornada pasada. Fran Escribá estrenó el banquillo del Zaragoza ante el Málaga. También rascaron un empate los de Mel, en este caso con una dificultad suprema debido a la inferioridad numérica. No era el primer partido, porque jugó la eliminatoria copera, pero sí el primer compromiso liguero.
El tercer y último, al menos de momento, aún no se ha jugado. La Ponferradina cambia de entrenador a horas del partido en La Rosaleda. José Gomes dimitió tras el último partido de los bercianos. Ahora será David Gallego el que ocupe su lugar.
Hasta en tres ocasiones el Málaga ha puesto a examen a tres nuevos entrenadores. Una dificultad añadida para el equipo y Mel a la hora de preparar el partido, aunque de poco sirve si al igual que en la fecha pasada te quedas con un jugador menos en el primer cuarto de hora.
