El Trops Málaga está a punto de cerrar la plantilla cara a la temporada que se avecina. Y es que antes de que comience la estadía, a inicios del mes de agosto, el técnico Quino Soler quiere tener cerrado el plantel para trabajar con él desde el principio. Es por ello que la dirección deportiva trabaja dando los últimos retoques a un equipo que, como dice su entrenador, “será competitivo”. En este sentido, otro jugador que firma su continuidad con el cuadro blanquiazul es Pablo Fernández, un malagueño de 21 años, zurdo, pretendido por otros conjuntos de la categoría e incluso de la Asobal, que, gracias a su envergadura y disciplina, se siente como pez en el agua en tareas defensivas, la principal virtud de los blanquiazules. Fernández se ha mostrado “entusiasmado” tras estampar la firma que le une al Trops un nuevo curso, “porque me hace especial ilusión seguir jugando, un año más, en casa, en mi tierra, en este club”, destacó el joven lateral derecho.
Asimismo, el jugador cree que el equipo “hará buen papel” en la campaña que arrancará el próximo 17 de septiembre, “ya que cada año damos un pasito más”, recordó. “Espera que podamos cumplir los objetivos que nos propongamos. Estamos haciendo un balonmano de nivel y tenemos que seguir así para hacer disfrutar a los aficionados”, deseó, al tiempo que pidió al público que apoye al Trops en cada partido, “porque nuestra cancha tiene que ser un fortín para que no se escapen puntos. Si logramos atar los encuentros de casa, habremos ganado mucho”, insistió. Pablo Fernández Molero nació en Málaga el 19 de febrero de 2001. El jugador, que mide 1,93 metros, pesa 97 kilos, ha participado en su etapa formativa en tres campeonatos de España con la selección andaluza, logrando dos veces el subcampeonato en categorías infantil y juvenil.
También con su club de origen, el Balonmano Málaga, logró un campeonato de Andalucía juvenil, fue convocado en varias ocasiones para las jornadas de tecnificación con la selección española juvenil y participó en el Festival Olímpico de la Juventud Europea, celebrado en Hungría en 2017. Por otro lado, cabe destacar sus logros como jugador de balonmano playa, enrolado a las filas del Ciudad de Málaga, tanto en categorías cadete como juvenil y sénior (tres medallas de bronces en el Campeonato de España y una de oro) y un tercer puesto con la selección española en el Europeo sub-18 disputado en Montenegro. En la actualidad, es integrante de la selección absoluta de balonmano playa.
