Turbulenta. Así es la actualidad blanquiazul, y más aún en los últimos días. La derrota ante el Huesca dejó una herida muy profunda en la plantilla y el cuerpo técnico. De hecho, el debate se encuentra sobre el banquillo, con un Natxo González que podría estar ante su último partido como técnico malaguista. Entre drama y drama, el partido se acerca, y el posible once del Málaga ante el Girona aún está en el aire.
La portería es toda una incógnita por primera vez en la era Natxo. Dani Barrio ha sido enormemente cuestionado por su error ante el conjunto aragonés, pero el vitoriano no es muy dado a realizar variaciones en la meta. En defensa, la vuelta de Víctor Gómez al lateral derecho podría ir acompañada de una pareja de centrales conformada por Andrés Caro y Mathieu Peybernes. El carril izquierdo, tras un partido tibio de Braian Cufré, podría estar ocupado de nuevo por Javi Jiménez.
En cuanto al centro del campo, parece evidente que el míster tiene tres jugadores predilectos. Alberto Escassi como integrante más defensivo y Jozabed junto a Febas en la labor creativa. No obstante, podríamos ver como en otras ocasiones al ilerdense jugando como segundo punta y al sevillano incrustado en la salida de balón.
El tridente ofensivo también deja varias dudas. Después de unos partidos sin dar señales de vida, Antoñín volvió a pisar el verde y podría repetir ante el Girona como titular en el costado izquierdo. La derecha, con la baja de Jairo, los experimentos podrían sucederse, siendo Kevin quien ocupe el costado contrario al que acostumbra. En la delantera, el regreso de Brandon podría ser la guinda a la lanza de ataque tras ser suplente ante el Huesca.
Así, el posible once del Málaga ante el Girona queda de la siguiente forma: Dani Barrio; Víctor Gómez, Andrés Caro, Peybernes, Javi Jiménez; Escassi, Jozabed, Febas; Antoñín, Kevin, Brandon.
Stuani se va a poner las botas