Se puede decir al revés, pero el Huesca es el lobo con piel de cordero que llegará mañana a La Rosaleda. El animal recién descendido que aspiraba a soñar otro objetivo se encuentra bajo la coraza de un equipo al que le está costando remontar el vuelo. De hecho, el conjunto de Xisco Muñoz no gana como visitante desde el pasado 8 de enero, cuando pasó por encima del Cartagena (0-3) con un estelar Dani Escriche. ¿En qué dinámica aterrizan los aragoneses en la Costa del Sol?
Pues en una no muy buena. A pesar del recuerdo más reciente -triunfo por la mínima sobre el Burgos en El Alcoraz (1-0)-, no pudieron ni rascar el empate en el templo del prácticamente descendido Alcorcón. Eso sí, en su apartado defensivo canta otro gallo con Andrés Fernández al mando. Quince porterías imbatidas a falta de diez jornadas hablarían maravillas de cualquiera… y más si te espera un equipo que ni siquiera llega al gol de media por encuentro.
Una victoria en los últimos cuatro compromisos, el mismo número extrapolado en puntos que les separa de los boquerones en la clasificación de plata. Con algún que otro viejo conocido y con la sensación de ser un pez fuera del agua, el Huesca es el lobo con piel de cordero que llegará mañana a La Rosaleda. El Málaga no vence en Martiricos desde noviembre, así que el hambre y las ganas se juntarán en lo que promete ser un duelo con las espadas por lo alto.