Cuando se dice que al Málaga le pasada de todo es que realmente es que la experiencia del club malaguista así lo narra. Esta historia sucedió en el convulso curso 2019-2020. El Lugo visitaba La Rosaleda en la jornada 21 de LaLiga SmartBank. El cuadro gallego jugaba un tal Peybernes, ahora central malaguista, y Tete Morente, que jugaría de boquerón la segunda vuelta de aquella misma competición, cosas de la vida. El Málaga era entrenado por Víctor Sánchez del Amo, que curiosamente viviría su último partido como entrenador de conjunto costasoleño en La Rosaleda. Ese era el escenario de una historia que tiene al Lugo, a De La Fuente Ramos y un descuento interminable como protagonistas.
El Málaga ganaba el partido gracias a un gol de Sadiku desde el minuto 12. Pero por desgracia, no se iban a llevar los tres puntos en este choque. Los malacitanos dominaron el partido. Sadiku, Juankar, Adrián tuvieron ocasiones muy claras para subir la cuenta en el electrónico de La Rosaleda. El Málaga falló mucho y pasó lo que nadie esperaba. Ya en el segundo tiempo un jugador del Lugo pisó al asistente de Oliver De la Fuente Ramos. La mala fortuna quiso que el línea tuviese que abandonar el campo en camilla provocando 10 minutos de descuento (5 por la lesión del árbitro y otros 5 por el partido).
En el minuto 100, Luis Muñoz iba a hacer una falta tonta en la frontal del área de la portería que aquella noche defendía Munir. El jugador malaguista y el resto de sus compañeros iban a protestar mucho la jugada aunque viendo la repetición la falta era clara. Pita coló la pelota en la portería malaguista en el minuto 102 del choque y el Málaga se quedaba con la cara partida como se puede ver en el resumen del partido. Una historia con el Lugo, a De La Fuente Ramos y un descuento interminable como protagonistas.
