Una de las que regresó esta semana es Merche Castellanos, que se dirige hacia su segundo año en el Costa del Sol Málaga. Y está en uno de los mejores momentos de su carrera. “Un verano atípico, pero muy bonito y especial. El verano soñado, ha sido perfecto”, cuenta la portera, que tuvo el privilegio de estar en los Juegos Olímpicos de Tokio: “La entrada en la Villa fue super espectacular, iba todo el rato mirando a los deportistas. Era el sueño de mi vida y por suerte lo he cumplido. Me quedo con un millón de recuerdos. Conocimos de la delegación española a bastantes, coincidíamos mucho con los tenistas, con las chicas y los chicos de baloncesto… Veíamos a mucha gente, pero con el tema del COVID-19 no puedes hacer mucha amistad con nadie”.
Ahora toca comenzar otro curso con el equipo malagueño y sin apenas tiempo para resetear. “Vienes mucho más preparada. Tienes la preparación de los Juegos, los Juegos y ahora la pretemporada. Es volver a empezar, pero con muchas ganas. Al final cuando no tienes mucho descanso físicamente y psicológicamente lo notas, pero no lo pienso. Estoy centrada en el equipo, en empezar bien y ya está”, explica la manchega, que habla sobre esta preparación: “Empezamos fuerte la temporada, pero ya está. Han tocado dos de los mejores equipos al principio y ya está. Puede ser bueno, puede ser malo, pero nosotras tenemos que hacerlo lo mejor posible en pretemporada y empezar fuerte. Mis compañeras están muy metidas, preparadas y con muchas ganas seguro después de la temporada pasada”.