El Málaga quiere a Antoñín. No es nada nuevo. Es un querer y no poder desde hace tiempo. Quizás, este verano existen más posibilidades de que se produzca el retorno del hijo pródigo. Una situación que ya conoce de primera mano el propio futbolista. Lo ve con buenos ojos pese al interés de otros equipos como el Tenerife. Por eso, Antoñín se deja querer y mucho.
El excanterano blanquiazul podría ser una de las piezas que aporte pólvora de cara al ataque malaguista. Es una de las posiciones necesitadas y el jugador está en el mercado. Así lo reconocía el propio director deportivo, Manolo Gaspar, durante la presentación de Dani Martín.
Uno de los mayores problemas que puede tener la operación es que el Granada quiere exigir un mínimo de partidos a su cesión. El jugador sabe que no cuenta para los planes de Robert Moreno y que el conjunto nazarí espera concretar pronto una salida beneficiosa para ambas partes. El Málaga está muy atento a esta situación y quiere la cesión de Antoñín. Así ya se lo ha hecho saber al Granada de manera oficial y al entorno del jugador.
La Cueva lo ve como un gran movimiento en un mercado complejo. Es un delantero versátil, polivalente y con gol. El club también considera que su incorporación es un golpe de efecto para la afición.
Antoñín disputó el curso pasado 30 partidos y logró 7 goles en el Rayo Vallecano donde logró el ascenso a Primera División. Es cierto que el malagueño solo fue titular en 15 de ellos por lo que el Granada estudia incluir una cláusula en la que se le garantice más partidos. Quedan días para el cierre de mercados y quedan aún episodios en esta negociación que sigue su curso.
El Málaga es consciente de que hay muchos equipos interesados, pero quiere tocar la fibra y utilizar también el toque sentimental con el componente: ‘jugar en casa’. El nuevo destino del delantero internacional sub21 queda en el aire pero, Antoñín se deja querer… y mucho.
