Era uno de los deseos de Manolo Gaspar y la dirección deportiva. Borja Garcés no jugará en Martiricos, el delantero de Melilla se aleja definitivamente del Málaga para poner rumbo a Leganés. Allí jugará cedido por el Atlético de Madrid después de que haya renovado su contrato con el conjunto colchonero hasta 2024. La buena pretemporada que ha hecho el delantero, ha gustado a Simeone y su cuerpo técnico, ha provocado un cambio de planes que no estaba previsto allá por el mes de junio cuando comenzó el interés de los blanquiazules por el jugador.
Garcés, que llegó a hablar con gente del Málaga CF a través de su agente, no era reacio a vestir la camiseta malaguista. El futbolista, con casa en la capital de la Costa del Sol y natural de Melilla, veía con buenos ojos el proyecto que en su día le explicaron Manolo Gaspar y José Alberto López. Desde La Cueva eran conscientes de la complejidad de la operación. Prácticamente el 70% de los equipos de LaLiga SmartBank habían preguntado por la situación del ariete. Tanta competencia hacía difícil su fichaje. Pero no era la primera vez que el Málaga salía airoso de una situación así.
El futbolista ha jugado 160 minutos en esta fase de preparación con el Atlético. Un hecho que ha engordado el caché de Borja Garcés y que le aleja definitivamente del Málaga. A Manolo Gaspar le quedan todavía opciones encima de la mesa. El mercado de fichajes cierra el próximo día 31 de agosto hasta las 23:59 horas. Todo hace indicar de que el paleño y su equipo de trabajo apurará al máximo las posibilidades del Málaga en este mercado estival. Mientras, José Alberto López sigue preparando el primer partido contra el Mirandés donde el delantero titular será Brandon Thomas.
