El Trops Málaga perdió en su visita a la cancha de la Unió Esportiva Sarrià por 28-26, en un partido sin mucha historia para los malacitanos, ya que consiguieron la permanencia hace semanas, y muy importante para los gerundenses, que, con esta victoria, certificaron la salvación de forma matemática ante su público. El cuadro de Málaga, pese a salir con un siete inusual, comenzó el choque muy serio, llevando el peso del partido, aun cuando no se jugaba nada. Aunque el Sarrià inauguró el marcador, los malagueños se hicieron dueño y señor del encuentro a partir de aquí, hasta el punto de que llegó a disfrutar de una renta de tres goles (4-7) en el 14:36.
El lateral izquierdo Carlos González estaba siendo el jugador más rentable en el ataque blanquiazul. Sin embargo, a partir del ecuador de la primera mitad, llegaría la reacción local, propiciada, principalmente, por los continuos errores malagueños en la faceta ofensiva, circunstancia que favoreció un parcial de 4-0 para los catalanes, lo que les llevó a ponerse por delante (8-7) en el 19:14. El dibujo del partido había cambiado totalmente y, ahora, era el Sarrià el que llevaba el peso del envite. Eso sí, el Trops, que estaba compitiendo bien, pudo empatar (10-10) a falta de tres minutos para el final del primer periodo. No obstante, y cuando parecía que el primer acto terminaría en tablas, el local Fina, por partida doble, dio una nueva ventaja de dos a los gerundenses para alegría de los aficionados del Sarrià, pero el chileno del Trops, Matías Paya, recortó distancias para poner el 12-11 definitivo.
La segunda parte arrancó con el cuadro local más enchufado, queriendo llevarse el partido a su terreno, dado que los dos puntos le daba la salvación matemática. Y, ciertamente, lo consiguió. El Trops jugaba con tranquilidad, con sucesión de pases, algunos de ellos errados en zona peligrosa que propiciaban el contraataque, y el Sarrià, con una marcha más, se desenvolvía con una velocidad que le daba sus frutos. Así las cosas, los locales consiguieron una ventaja de cuatro (19-15) en el 11:42, la mayor renta del partido hasta el momento. Y es que la defensa malagueña no estaba fina, pese a que el meta Pol Gavañach, en la cancha durante la segunda mitad en detrimento de Oliva, paró un lanzamiento desde los siete metros, y el ataque era bastante romo, con muchos fallos en los pases y en la finalización.
Por contra, el Sarrià practicaba un balonmano rápido, con acciones individuales resueltas de forma satisfactorias y con detalles en la portería. Estaba claro que, de seguir así, los dos puntos se quedarían en Girona, como así ocurrió al concluir el choque con el resultado de 28-26, si bien el Trops a punto estuvo de dar la vuelta al partido en los instantes finales, tras empatar (25-25) en el 25:19, una remontada que fue en balde, ya que el Sarrià, que se jugaba la continuidad, una temporada más, en la División de Honor Plata, buscó la victoria con ahínco hasta que lo consiguió. Pese a la derrota, el Trops sigue líder de la clasificación del grupo de permanencia, al empatar el Zarautz en casa del Lalín, y jugará su último encuentro de esta campaña el próximo sábado, a las 19.00 horas, en el pabellón Fray Francisco Baños del colegio Los Olivos, ante, precisamente, el Lalín gallego, ya descendido.